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OPINIÓN
Columna
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Nuestros referentes

Prosigue el debate entre los economistas sobre sus responsabilidades en el pronóstico tardío de la crisis, y en sus errores de apreciación sobre la profundidad de la misma. Pende sobre la profesión la sospecha de que sus recetas han contribuido a la debacle más que sus remedios paliativos, o porque el consenso dominante fue incapaz de introducir en el análisis algunas variables decisivas o porque excluyó factores muy significativos para favorecer la ideología de la desregulación. Un profesor de la Universidad de Vigo, Xosé Carlos Arias, ha hecho un inventario de las principales publicaciones que están circulando sobre este asunto, y lo ha agrupado bajo el significativo título de Consecuencias del fallo sistémico. ¿Hacia una destrucción creativa en la macroeconomía?

La crisis ha actualizado la teoría de la destrucción creadora de empresas. Pero también de la macroeconomía

Los científicos sociales se diferencian, entre otras cosas, por tener mayor capacidad divulgativa o mayor pasión investigativa. Son minoría los que poseen ambas capacidades y en ellos funcione con equilibrio esa mezcla (Krugman, Stiglitz...). Entre los españoles se puede citar, por ejemplo, al sociólogo Manuel Castells, que frecuenta con éxito los medios de comunicación y acaba de aparecer en el primer lugar entre los expertos españoles en ciencias sociales más citados, en una lista que elabora el Instituto Lauder, de la Universidad de Pensilvania, que mide la influencia de sus actividades de investigación en todo el mundo. En esa lista hay seis economistas (Andreu Mas-Colell, Jordi Galí, Manuel Arellano, Xavier Sala i Martí, Juan José Dolado y Xavier Vives) y cuatro sociólogos (Castells, Juan José Linz, Vicente Navarro y Mauro Guillén). Por cierto, las universidades y escuelas ubicadas en España aportan cinco de los diez puestos y, entre ellas, la Universidad Pompeu Fabra tiene a tres miembros de su profesorado.

Andreu Mas-Colell, el primer economista español de la lista, es un mito desde hace muchos años en la academia de los científicos sociales de nuestro país. Lo que se denomina un referente, en el sentido más solemne del término. Catedrático de la Pompeu Fabra y secretario general del European Research Council, antes se desempeñó como profesor en las universidades de Berkeley y Harvard y acaba de recibir, junto a su maestro, el también economista Hugo Sonnenschein, el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de economía, finanzas y gestión de empresas por ayudar a interpretar el comportamiento del consumidor. Según el jurado, los trabajos de Mas-Colell y Sonnenschein han permitido a los economistas abordar un rango mucho más amplio de problemas prácticos, así como cambiar la forma en que se enseña economía en todo el mundo.

Acostumbrados a flagelarnos por las limitaciones de la economía como ciencia social, hay que aprovechar las oportunidades que nos da la realidad para manifestar que, a pesar de las primeras, esta disciplina ha avanzado mucho, entre otros aspectos por la labor de sabios como Mas-Colell.

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