Lady Gaga, estrella global en los premios de la música británica
Por si alguien albergaba alguna duda, la estadounidense Lady Gaga confirmó el pasado martes que ella es la última estrella verdaderamente global en la era de la hiperfragmentación de las audiencias. Con tres premios Brit en las categorías de mejor debutante, solista y disco internacionale -distinción que la Industria Fonográfica Británica lleva años reservando a artistas de su propia geografía-, ganó sin ambages la cacareada "batalla de las nenas" con la que la prensa local calentó la trigésima edición de la gala. Otras nenas, Lily Allen y Florence and the Machina, se fueron a casa con el premio a mejor solista femenina británica y mejor álbum británico, respectivamente.
Sobre el escenario, Gaga sustituyó el número previsto por un sosegado medley de sus temas Telephone y Dance in the dark en homenaje a su amigo Alexander McQueen, hallado muerto en su residencia londinense la semana pasada.
Las Spice Girls se llevaron el premio especial a la mejor actuación en la historia de la gala de los Brit. Y Robbie Williams, a toda una carrera.
