La Cámara fijará cupos de iniciativas a los grupos en los plenos ordinarios

La Junta de Portavoces del Parlamento tiene garantizada hoy una reunión conflictiva: debatirá una propuesta de la Mesa que pretende fijar cupos fijos a cada grupo en el número de asuntos a debatir en los plenos ordinarios. Como primer efecto, supondrá una reducción de las iniciativas de los tres partidos que integran el Grupo Mixto, con un solo parlamentario cada uno, y cuenta, por tanto, con el desacuerdo de éstos.

La espinosa cuestión tiene origen en el malestar del PNV, que, como grupo mayoritario, pidió, ya en otoño, introducir la proporcionalidad con la representación a la hora de programar los órdenes del día. El PNV vio al inicio del curso legislativo cómo los plenos se llenaban con iniciativas, principalmente proposiciones no de ley, registradas por los tres parlamentarios del Grupo Mixto, y también por Aralar, que tiene cuatro. Ello iba en detrimento de su propia presencia, y entendía que ésta debía ser mayor, por su condición de grupo más numeroso de la oposición y de la Cámara. La situación fue realmente llamativa, sobre todo durante los primeros plenos de septiembre y octubre. Los tres integrantes del Grupo Mixto y Aralar tenían registrada una avalancha de iniciativas y el único criterio para llevarlos al temario del día era el orden de llegada al registro de la Cámara. Por ejemplo, en los cuatro primeros plenos se vieron sólo siete iniciativas del grupo mayoritario, contra doce del Grupo Mixto y cinco de Aralar.

Los tres parlamentarios del Grupo Mixto se oponen a la medida

Para formalizar un criterio, puesto que el Reglamento no lo fija, la Mesa -en la que están representados los tres primeros partidos, PNV, PSE y PP-, acordó la semana pasada una propuesta que fija cupos a cada grupo. Ese acuerdo de la Mesa, adoptado el día 2 y que ayer fuentes de la presidencia dijeron que "no es firme", figura hoy en el orden del día de la Junta de Portavoces. A ésta asisten los portavoces de todos los grupos, y en el caso del Mixto se admite la presencia de sus tres integrantes. Según la propuesta, el PNV tendrá derecho a que se debatan cinco iniciativas suyas cada dos plenos ordinarios; el PSE-EE podrá incluir cuatro; el PP, tres; Aralar, dos y el Grupo Mixto, otras dos. Es decir, todos los grupos tienen garantizada al menos una iniciativa por pleno. La diferencia estará en que, según ese criterio, el Grupo Mixto tendrá en adelante que repartir las dos que le corresponden entre sus tres parlamentarios. Eso supone que cada uno de ellos podrá someter a debate una proposición propia cada tres semanas.

La propuesta de la Mesa tiene el aval de un informe previo de los servicios jurídicos de la Cámara, que recoge, entre otras argumentaciones, los usos de las otras Cámaras legislativas, según señaló el peneuvista Iñigo Iturrate. "Salvo dos o tres, todos los Parlamentos autonómicos tienen cupos", indicó. En el Congreso existen también. El PNV, por ejemplo, sólo puede presentar una proposición de ley y otra no de ley en cada período de sesiones. En la práctica, éstas últimas son más, porque el grupo del Gobierno no agota su cupo, como previsiblemente ocurrirá en la Cámara vasca, y se pasa a otros partidos. La propuesta cuenta, de antemano, con el desacuerdo unánime de los tres partidos integrados en el Grupo Mixto. Aralar no dio su opinión, a la espera de conocer hoy los argumentos de quienes la defienden. Fuentes de EA mostraron su opinión "negativa" y reclamaron que se siga usando el criterio cronológico. "No se puede limitar la capacidad de iniciativa de un parlamentario", indicaron. El PNV, promotor de la limitación, quiere "aparecer como el único referente abertzale de la Cámara", dijeron. Ezker Batua se opone también, aunque su parlamentario, Mikel Arana, eludió realizar ninguna valoración. Fuentes de EB consideraron que se perjudica "la pluralidad de la Cámara". El representante de UPyD, Gorka Maneiro, cree que el cambio tiene por objetivo "acallar la voz de las minorías".