El fiscal de Nueva York se pone duro
Nueva York se ha mostrado dura en aquello en lo que Washington dio muestras de debilidad. El fiscal general del Estado de Nueva York, Andrew Cuomo, está haciendo lo que la Comisión de Valores de EE UU (SEC) se negó a hacer: acusar a Bank of America, a su ex jefe Ken Lewis y a su ex consejero delegado Joe Price de engañar a los inversores sobre el acuerdo con Merrill. La jugada puede ayudar a la SEC, pero el organismo sigue dando una impresión de debilidad.
El regulador de la Bolsa también endureció sus argumentos. Después de que el juez Jed Rakoff rechazara el primer intento de acuerdo el año pasado por considerarlo demasiado débil, la SEC ha vuelto con una sanción de 150 millones de dólares, es decir, cinco veces más que la propuesta inicial. Bank of America también accedió a reforzar su transparencia financiera y su gestión en un intento de aclarar las afirmaciones de que miles de millones de dólares de las pérdidas y los pagos de bonus relacionados con Merrill Lynch se anunciaban con lentitud. Pero Rakoff todavía debe aprobarlo.
Probablemente le agradará el que los accionistas ya no sigan pagando el precio del engaño. Ahora la SEC tiene previsto devolverles la multa directamente. Pero puede que a Rakoff le convenza más dónde ha empezado Cuomo que dónde lo dejó la presidenta de la SEC, Mary Schapiro.
Quien está tratando de obligar a estos individuos a rendir cuentas como quería Rakoff es el nuevo fiscal general de Nueva York, no la SEC. La demanda del Estado sostiene que los peces gordos de Bank of America se consideraban "demasiado importantes para decir la verdad". Afirma que Lewis y Price no hicieron públicas las enormes pérdidas de Merrill a pesar de que los asesores legales les aconsejaran lo contrario. Los abogados de los dos hombres rechazaron las acusaciones.
Bank of America también alega que la SEC disponía de la misma información que Cuomo, pero decidió no procesar a estas personas. Y si bien es cierto que las leyes sobre emisiones de valores de Nueva York pueden darle a Cuomo un campo de acción más amplio que a los federales, también es cierto que Cuomo aspira a ser gobernador, como lo fue su padre. Los fiscales de Nueva York tienen una especial habilidad para acaparar los titulares cuando lo necesitan.
Lewis es el primer jefe de un banco estadounidense rescatado que ha sido acusado por delitos relacionados con la crisis. El cometido de la SEC es proteger a los inversores, pero parece que Nueva York intenta hacer su trabajo. -
