Imágenes de una década sombría
Una exposición fotográfica recorre en Sevilla la vida cotidiana en los setenta
Una chica dirige la mirada hacia la ventana de su buhardilla. La cama deshecha, una guitarra, un par de botas y una taza ocupan el espacio en esta fotografía de Alberto García-Alix. Un hombre y una mujer remedan un baile -o un abrazo- que parece condenado al fracaso en otra imagen de Anders Petersen. La mirada de un joven surafricano se adueña de la cámara de David Goldblatt en una serie dedicada a Soweto. Se trata de tres fotos que reflejan las dudas y el desconcierto de la década de los setenta, un periodo sombrío en el que el mundo vivió cambios decisivos. Las imágenes pertenecen a la exposición Los 70. Fotografía y vida cotidiana, que se inaugura mañana en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (www.caac.es), en la Cartuja de Sevilla.
La muestra presenta 200 fotos de 23 creadores en el CAAC
La exposición reúne dos centenares de instantáneas de 23 autores. Además de imágenes de los tres fotógrafos citados, la muestra presenta obras de Laurie Anderson, Christian Boltanski, Victor Burgin, Sophie Calle, William Eggleston, Viktor Kolár, Eugene Richards, Allan Sekula, Cindy Sherman, Malick Sidibé y Kohei Yoshiyuki, entre otros.
Sergio Mah y Paul Wombell son los comisarios de la exposición, que estará abierta hasta el 25 de abril. La muestra plantea un recorrido por la fotografía de los años setenta. Fue, precisamente, en esta época cuando la fotografía se revalorizó en el ámbito artístico. Muchos creadores insistieron entonces en la necesidad de reforzar los vínculos entre el arte y la vida. Lo cotidiano y lo íntimo adquirieron un papel protagonista en diversos campos del arte y el saber. Dentro de esta corriente, la fotografía, con su carga de inmediatez y sus enormes posibilidades de registro documental, fue considerada una herramienta esencial.
Los años setenta fueron pródigos en convulsiones. Tras la efervescencia festiva de los sesenta, la década siguiente vino acompañada de la crisis de los países industrializados a causa del bloqueo en el suministro de petróleo. El conflicto entre Israel y los países árabes y la guerra de Vietnam dibujaron un fondo lóbrego en la vida de millones de personas. El escándalo Watergate, que llevó a Richard Nixon, presidente de EE UU, a renunciar a su cargo, el golpe de Estado de Pinochet en Chile o la falta de libertad y las carencias económicas de la Unión Soviética y sus países satélites contribuyeron al pesimismo.
Numerosos países fueron machacados por dictaduras en esos años. El terrorismo salpicaba de sangre muchas grandes capitales. La toma del poder en Irán por los partidarios de Jomeini culminó la década. Este panorama político y social incidió en la vida de la gente con su reguero de muertes, pobreza y aspiraciones frustradas. La pintura y el cine de esta época se hicieron eco de la desesperación de muchas personas, que vieron cómo su vida se hundía y a las que no les quedó ni siquiera la esperanza de un futuro mejor.
"Los años setenta constituyen un periodo en el que se producen unos cambios históricos y, al mismo tiempo, unos cambios muy importantes en el mundo del arte. Se da la consciencia de una cierta quiebra del proyecto moderno. La exposición intenta hacer una crítica sobre el fracaso moderno en el campo social y artístico", comentó ayer Mah en la presentación de la muestra.
"En los setenta, hay un diálogo entre los fotógrafos artistas y los artistas que utilizan la fotografía. Es un momento en que este diálogo ha sido más rico. Y un elemento motivador de este diálogo ha sido el interés en trabajar por lo cotidiano. Esto supone trabajar en esa paradoja entre lo íntimo y lo público, lo personal y lo político", agregó el comisario de la exposición.
Años 70. Fotografía y vida cotidiana está coproducida por el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, el MAN Museo D'Arte Provincia di Nuoro (Italia) y La Fábrica/PHE09 con la colaboración de la Fundación Banco Santander y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
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