Sarkozy sale a cazar el voto para los comicios regionales

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, salió ayer en defensa de su gestión a menos de dos meses de las elecciones regionales, unos comicios clave para el Ejecutivo que sirven de examen a medio mandato. El jefe de Estado, con una tasa de aprobación inferior al 40%, se entregó a un ejercicio didáctico sobre las medidas de su Gobierno. Anunció que su Gabinete tomará decisiones sobre la reforma del sistema de pensiones antes de final de año, reiteró su apoyo al polémico debate sobre la identidad nacional y reafirmó el compromiso de su país en Afganistán.

En una entrevista en directo en el telediario de mayor audiencia, del canal privado TF1, seguida de un debate con 11 franceses elegidos por la cadena, Sarkozy dio el pistoletazo de salida al tema que centrará gran parte del curso político, el de la reforma de las pensiones. Sarkozy se comprometió a garantizar las pensiones y examinar la posibilidad de aplazar la edad de jubilación, y dijo que las decisiones se tomarán "antes de fin de año".

El dirigente anuncia una reforma del sistema de pensiones en Francia

El presidente abordó también la presencia de Francia en Afganistán, donde afirmó la voluntad de su país de no retirarse, aunque reiteró que París no mandará más soldados de combate, sin descartar los efectivos dedicados a labores de formación y de ayuda civil. En cuanto a los dos periodistas franceses secuestrados en Afganistán, se encuentran "con vida y en buen estado", aunque señaló que la situación "es extremadamente difícil y peligrosa".

Sarkozy también repitió su intención de mantener una política firme frente a la inmigración ilegal, en referencia al descubrimiento este fin de semana de 123 clandestinos kurdos procedentes de Siria en las costas de la isla de Córcega. "No dejaré a Francia desarmada frente a un problema de inmigrantes llegados de forma ilegal, como ha conocido Italia".

Por último, el presidente defendió de nuevo la utilidad del debate sobre la identidad nacional, a punto de concluir y salpicado por los escándalos desde su puesta en marcha a principios de noviembre, como un "debate que se desarrolla dignamente y que es necesario".

La cita era importante para el presidente, cuya popularidad está en horas bajas. Sarkozy invitó a los franceses a hacerle preguntas, que formularon los ciudadanos presentes en el debate, a través de su página en la red social Facebook. Se trataba de presentarse como una figura de unidad, con la vista puesta en las elecciones regionales del 14 y 21 de marzo, y de abrir la próxima gran reforma sobre la elevación de la edad legal de la jubilación.

El tema que centró gran parte de las preguntas fue el paro. "Francia resiste mejor que los otros, dado que el desempleo se ha duplicado en EE UU y España", explicó Sarkozy a una joven recién licenciada en paro. "Sé que en las semanas y los meses que vienen el paro retrocederá", dijo. Para ello, insistió en seguir con una política de reducción fiscal.