La economía real lastra las cuentas de la banca en Estados Unidos
Lo peor del deterioro del crédito ha quedado atrás en EE UU. Pero con una tasa de paro del 10% y la vivienda sufriendo, será un coste que hará mella durante tiempo en el balance de entidades que, como Bank of America, Wells Fargo, Citigroup y JPMorgan Chase, dependen fuertemente del consumo. Ahora, los bancos cruzan los dedos para que la economía gane tracción y no haya recaídas.
Bank of America, el primer banco de EE UU, cerró el año de las crisis con unas ganancias de 6.300 millones de dólares (4.409 millones de euros). El beneficio pudo ser casi el doble si en el cuarto trimestre no hubiera perdido 5.200 millones por la devolución de los 45.000 millones que le inyectó el Tesoro para ayudarle a digerir Merrill Lynch. Descontada esa partida, las pérdidas quedarían en 194 millones.
La compra de Merrill Lynch y de Countrywide permitió al banco elevar sus ingresos un 63%, hasta 120.900 millones. Sus resultados de 2009, como el de los otros grandes bancos, muestran signos de mejora en la cartera de crédito comparando con el final de 2008. Pero sigue habiendo mucho ruido en la economía de la calle.
La restitución de las ayudas se notó menos en Wells Fargo. La entidad ganó 2.800 millones en el trimestre (1.959 millones de euros), lo que le llevó a cerrar el año con un beneficio récord de 12.300 millones. Sus ingresos anuales alcanzaron los 88.700 millones, el doble que en el ejercicio anterior, por la integración de Wachovia.
Por su parte, Morgan Stanley tuvo un beneficio de 617 millones en el trimestre (431 millones de euros) y cerró el año con un positivo resultado de 1.350 millones. El banco destinará 14.440 millones a remunerar a sus empleados, un 31% más que en 2008.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.