Un Madrid a medio hacer

Con la contratación como técnico de Ettore Messina, con cuatro Euroligas en su haber sin contar otros títulos, el Madrid quiso dejar claro que no iba a escatimar recursos para reactivar su sección de baloncesto. Pero la humillante derrota ante el Barcelona (57-79), el pasado domingo, unida a la desastrosa racha del equipo, que ha perdido cuatro de los últimos cinco partidos -ganó en Atenas al Panathinaikos, actual campeón de Europa, y cayó en las canchas del Prokom, el Xacobeo y el Caja Laboral- tras un inicio de temporada fulgurante, ha hecho saltar las alarmas. El Madrid se siente a medio hacer.

"Nos faltaba casi un quinteto titular, pero no lo hemos intentado. No es lo correcto", reconoció Messina tras el recital del Barça. Acosado por las bajas, al preparador no le funcionó ni la psicología para capear el temporal como hizo con su legendaria bronca de hace un mes ante el Armani Jeans, de Milán. "¿Somos mediocres o no nos interesa nada? ¡Tenéis que poner un poco de esto!", arengó entonces a sus jugadores con la cara desencajada y una mirada asesina señalándose el corazón. El Madrid remontó los 12 puntos de desventaja.

"Debemos entrenarnos más y mejor", resume el preparador italiano

Sin embargo, el cuadro de Xavi Pascual no dio la menor opción al laureado entrenador italiano, dos millones de euros anuales de contrato, que remozó de arriba abajo una plantilla en la que sólo cinco de los 14 jugadores repiten (Llull, Bullock, Hervelle, Reyes y Van den Spiegel). Mientras Hervelle -hasta ayer dado de baja- y Massey siguen en la nómina a la espera de otro destino, los últimos rivales han sacado petróleo de las concesiones del juego interior blanco, que ha quedado reducido casi a la mínima expresión: Lavrinovic, Garbajosa y el novato Dasic, ya que Reyes se lesionó en el último ensayo previo al choque de trenes contra el Barça con un golpe en un pómulo que podría dejarle en la enfermería un mes.

No es la única ausencia sensible: Llull necesitará al menos dos semanas para recuperarse de un esguince de tobillo y Hansen renquea de una lumbalgia. El parte médico de Van den Spiegel empeoró el panorama: el pívot belga estará sin jugar al menos tres meses por un problema en un pie y, salvo sorpresa, pasará por el quirófano. A su vez, Velickovic, ala-pívot toda la vida, no termina de adaptarse a su nueva condición de alero.

Las consecuencias son evidentes para Messina: "Necesitamos que los jugadores, cuando nos falta Llull, puedan presionar más, mover mejor el balón y ver las situaciones de ventaja en el ataque. Hemos jugado muchas veces muy rápido. Tenemos que acercarnos a la canasta. Tiramos mucho desde fuera y no presionamos a los escoltas... Debemos entrenarnos más y mejor".

"Podríamos excusarnos en que nos faltaba medio equipo, pero no lo vamos a hacer. No hemos estado al nivel", confiesa Garbajosa. "Los que hemos estado y los que no están... Todos somos profesionales. El Barça nos ha pasado por encima. Pero hay que reaccionar para olvidar este horrible diciembre", resume el ala-pívot.

La escuadra azulgrana domina las estadísticas con el mejor ataque (79,28 puntos) y la mejor defensa (62,78). El Madrid, séptimo en el apartado ofensivo (76,35) y tercero en el defensivo (70,28) -por detrás del Cajasol de su ex, Joan Plaza-, ni siquiera tiene un representante entre los diez mejores anotadores, reboteadores y asistentes. "No somos niños. Es duro, pero para mejorar es necesario hablar en el vestuario", hace autocrítica Bullock.

Mientras Jaric podría debutar esta tarde frente al Estudiantes (18.45, La 2) e incluso Hervelle tener sus minutos, el equipo del Ramiro se ha reforzado con el escolta estadounidense Chris Lofton, de 23 años, que ha disputado este curso dos partidos con el Caja Laboral. Además, el conjunto colegial lucirá en la camiseta a su nuevo patrocinador, la aseguradora Asefa. Con seis victorias y ocho derrotas, el grupo de Luis Casimiro no puede permitirse más fallos: una derrota en el derby supondría alejarse de manera casi definitiva de los ocho primeros puestos, los de la Copa.