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Un GPS identificará la procedencia del pulpo descargado en Bueu

Biólogos y pescadores idean una etiqueta que marca en Internet las capturas

Los pescadores de la cofradía de Bueu tendrán un instrumento más para garantizar la procedencia del pulpo que comercializan. Se trata de un dispositivo GPS que, incorporado a las embarcaciones, permitirá al consumidor conocer la ruta exacta seguida por el barco en el que se capturó el cefalópodo. El nuevo sistema, que empezará a aplicarse en unas pocas semanas, es uno de los 173 proyectos colectivos subvencionados por la Consellería do Mar para potenciar la comercialización de productos gallegos y la regeneración de zonas marisqueras improductivas. La ayuda, de 188.996 euros, cubre todos los gastos del proyecto.

El consumidor que desee conocer de qué lugar proviene el pulpo que ha comprado, podrá hacerlo con una simple conexión a Internet. Cada animal llevará una etiqueta con un código individual que, introducido en una página web en preparación, indicará la zona en la que se produjo la captura. Hasta ahora era posible conocer el barco y la lonja de procedencia, así como algunos datos sobre la calidad, pero no se precisaba el punto exacto de la captura. Esta es la principal novedad del proyecto Auctio Octopus, diseñado por los biólogos y pescadores de la cofradía. Su primera apuesta fue la creación en 2007 de la marca colectiva Polbo das Rías, a la que en la actualidad están adscritas 76 embarcaciones artesanales, la mayoría amarradas en Bueu.

Entre 2007 y 2008 la facturación de la lonja se incrementó en un 10%

Con la marca llegó el marcado individual para el pulpo, operativo desde ese mismo año. También se impuso un sistema de autocontrol sanitario -llamado AP PCC-, hoy muy extendido en las industrias de la alimentación, que no sólo advierte de los problemas de higiene, sino que además indica qué se debe hacer en concreto para solucionarlos. "Son situaciones poco probables, pero que en el caso de darse son más fáciles de detectar", reconoce Alberto Garazo, encargado de la gestión comercial y de calidad de la cofradía de Bueu.

A la higiene se suma ahora una mejora en la trazabilidad del pulpo. Sólo el cefalópodo capturado en el entorno de las rías de Vigo y Pontevedra -incluyendo Illas Cíes e Illa de Ons- podrá ser etiquetado como Polbo das Rías. Es una manera de defender el sector artesanal del pulpo, que entre 2001 y 2006 registró una bajada de precios en origen del 6%, en parte por el descenso del consumo. Bueu, sin embargo, se ha librado de la crisis y mantiene los precios del cefalópodo unos 40 céntimos por encima de la media del resto de Galicia. "El pulpo de esta zona está muy bien considerado por su alimentación [sobre todo marisco] y por su rendimiento en la cocina", explica Garazo, quien añade: "Y cada día hay más clientes preocupados por la calidad".

No obstante, la competencia del pulpo importado, procedente sobre todo de Marruecos y Japón, y la subida del precio del combustible ponen en aprietos al sector, que se defiende apelando a la calidad. "Queremos que la gente sepa lo que está comprando. Este sistema de etiquetado es único, aunque ha sido difícil diseñarlo porque la carne del pulpo es muy blanda", explica Garazo. Al final será una etiqueta de lazo en el sifón -donde el cefalópodo absorbe y expulsa el agua, en la parte inferior de su cuerpo- la que identifique al animal.

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Desde la implantación de la marca Polbo das Rías, el número de descargas en el puerto de Bueu ha aumentado, contra la tendencia de los últimos años a desplazarse a los puertos más grandes. "En Bueu sufríamos la huida de barcos a la lonja de Vigo", recuerda. Actualmente, el 12% de las descargas de pulpo de Galicia se realizan en Bueu, lo que lo convierte, con Ribeira en O Barbanza, en el principal punto de descarga de pulpo de la pesca artesanal. La lonja facturó en 2008 3,8 millones de euros, un 10% más que en el año anterior.

Para mejorar la venta, el Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo, dependiente del CSIC, intenta ahora alargar la vida comercial del pulpo fresco. Y en la cofradía ya trabajan para poner en marcha un portal web de comercio electrónico que evite a los clientes desplazarse a la lonja de Bueu para hacer los pedidos.

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