Bronca entre los empresarios vigueses y el PP

La bronca en Vigo a cuento de las cajas es monumental. El alcalde, Abel Caballero, ha organizado una ronda de contactos con las "fuerzas vivas", para reforzar el frente contra la fusión, que se ha convertido en su particular tema estrella.

Primero se reunió con la asamblea de la Cámara de Comercio y ayer intervino en un desayuno organizado por el Club Financiero. El PP local tiró a dar: Chema Figueroa atacó primero al presidente cameral José García Costas intentando desautorizarlo -recordó que forma parte del consejo de la caja y su grupo de empresas tiene créditos con la entidad-. Ayer hizo lo mismo, sin mencionarlo, con Jaime Borrás, presidente del Club (su empresa, Artai, está participada por la caja en un 26%). "Una persona que sea socio de Caixanova no podrá opinar, y si lo hace es de una manera partidista e interesada", espetó.

Ambos le contestaron. El primero recordó que su vinculación es pública y conocida y que Figueroa "no tiene ni idea", de cómo funcionan las cajas. El segundo, en la misma línea: "La mitad de los empresarios y ciudadanos de Vigo deben de tener alguna vinculación con la caja", ironizó. "Mi opinión la hago como presidente del Club de forma totalmente independiente, que no se confunda".

El gesto ha abierto una brecha en las relaciones del PP con las instituciones empresariales, que siempre había sido más que fluida. Pocos se explican la estrategia que está adoptando el partido en Vigo a sabiendas de que se juega con ello parte de sus apoyos de cara a las elecciones municipales de 2011..

Aunque no todo es consenso en la parte empresarial. Víctor Moro, ex gobernador del Banco de España en Barcelona, apuesta por la fusión y ayer lo argumentó con datos ante el alcalde. "Según la Confederación de Cajas, la situación de las dos es similar. Sus ratios están por encima de lo exigido por Basilea [comité de gobernadores de los bancos centrales]", aseguró.

En el sector conservero se han oído voces favorables a la fusión en el seno de la propia Confederación de Empresarios (CEP). Mientras, la asociación de promotores inmobiliarios se niega a rechazar o apoyar la unión entre cajas hasta no tener más datos para justificar su toma de postura.