Contra el orden internacional

Michel Platini, el presidente de la UEFA, se lo advierte a sus compatriotas franceses: "El Trap maneja perfectamente el vestuario. Es inteligente y sabe lo que hace". Se refiere a Giovanni Trapattoni (Cusano, Italia; 1939), quien fuera su entrenador en el Juventus desde 1982 hasta 1986, periodo en el que conquistaron siete títulos, y ahora al frente de la República de Irlanda. El Platini jugador mantuvo serias diferencias tácticas con el viejo Trap, que instaba a su equipo a defenderse cuando se ponía por delante en el marcador, pero le reconoce la agudeza en la preparación emocional para ese doble enfrentamiento de repesca que comienza hoy (20.45, Eurosport) en el estadio Croke Park, en Dublín, y se prolongará el miércoles en el Stade de France, de París, en busca de una plaza en el Mundial de Suráfrica 2010.

Ante la avalancha física irlandesa, el equipo francés confía en Henry

La vacante de Cristiano Ronaldo en el conjunto luso la cubrirá Nani

A los 70 años, Trapattoni aceptó rebajar sus honorarios con tal de seguir al frente de Irlanda y probar su penúltimo reto. "Los jugadores no creían que podían ganar como irlandeses. Les he ayudado a cambiar esta mentalidad. Les dije que no aceptaran el orden establecido en el fútbol internacional. Todos juegan en la Liga más fuerte del mundo: la Premier", argumenta el preparador italiano. Claro que la Irlanda de Robbie Keane viene de una larga travesía. Ya se perdió el tren al Mundial de 2006 y a la pasada Eurocopa de Austria y Suiza. No son nadie en Europa hasta que Trapattoni demuestre lo contrario.

Ante la presumible avalancha física irlandesa, el siempre cuestionado seleccionador francés, Raymond Domenech, apuesta hoy por la enorme fortaleza como mediocentros de Lass Diarra y Alou Diarra. Este último, pilar del Girondins, intimida en el juego aéreo. Por delante, el elegante Gourcuff dirigirá un ataque formado por Anelka por la derecha, Henry por el centro y Gignac por la izquierda. Henry, de 32 años, ya asumió la responsabilidad frente a Rumania en la fase clasificatoria. Desde su individualismo y desde la tranquilidad que le da haber ganado con el Barça la Champions, el único gran título que le faltaba, puede liderar a Francia, según opina en L'Équipe el ex centrocampista Pétit, tantos años compañero en la selección.

El punto débil de Francia es quizá su portería, en la que Lloris, el meta del Lyon, viene de recibir cinco goles el pasado fin de semana frente al Marsella (5-5), varios de ellos en errores suyos evidentes. El último Mundial que se perdió la todavía subcampeona del mundo fue el de Estados Unidos 1994, eliminada por Bulgaria. Cuatro años después ganaría la Copa del Mundo que organizó en 1998. Esta vez ha sido Serbia la que la ha apeado de la clasificación directa.

Hay vida detrás de Cristiano Ronaldo. El enfrentamiento entre el Real Madrid y la federación portuguesa a cuenta del tobillo lesionado del delantero luso ha eclipsado el partido de esta noche (21.30, GolTV) en el estadio Da Luz, en Lisboa. Pero Portugal, que quiere organizar junto a España el Mundial de 2018, se juega mucho. Y para recibir a Bosnia, el seleccionador, Carlos Queiroz, ha convocado a una especie de espía: el central Ricardo Costa, del Wolfsburgo, a quien no citaba desde hacía tiempo, llamado ahora para que cuente los secretos de las estrellas bosnias de la Bundesliga: su compañero Dzeko, que marcó 26 goles para el Wolsfburgo en la pasada Liga y nueve en la fase de clasificación para el Mundial de Suráfrica, y su rival Ibisevic, también goleador en el Hoffenheim. Además de Salihovic, media punta del Hoffenheim.

Dirigida por el croata Miroslav Blasevic, considerado un héroe en Sarajevo, Bosnia disputó su primer partido internacional el 30 de noviembre de 1995, tras la guerra de los Balcanes. Y este segundo puesto en el grupo de España, que le ha permitido disputar la repesca, ha sido su mayor logro en el panorama internacional.

La vacante de Cristiano la ocupará Nani, su ex compañero en el Manchester United, tal como sucedió en el choque decisivo frente a Hungría (3-0), en el que el madridista se resintió de la lesión. Simão jugará en el otro extremo tratando de servir balones a Liedson, en horas bajas con su Sporting. Lesionado Bosingwa, el lateral derecho será para el valencianista Miguel, muy recuperado tras su pésima campaña anterior. La sorpresa puede saltar en el izquierdo, donde ha levantado expectación el joven Fabio Coentrão, de 19 años, un extremo reconvertido que fue la sensación en los últimos encuentros del Benfica. Ocuparía el puesto del malaguista Duda. Semifinalista en el Mundial de Alemania 2006, la última vez que Portugal faltó a una gran cita fue en Francia 1998.