"Una cuestión de minutos"

Durmió en el pecho el pelotazo lanzado por el central de la Cultural Leonesa, controló la pelota sobre el césped, levantó la cabeza, amagó el pase a Chigrinski, condujo tres metros con la cabeza bien alta, se saltó la primera línea de presión de los leoneses y buscó a Gai, completamente abierto en el extremo izquierdo, haciéndole llegar el balón, con un pase largo medido. Guardiola, en el banquillo, miró a Tito Vilanova y sonrió: Rafa Márquez está de vuelta. En León jugó su primer partido completo de la temporada. "No estoy en mi mejor momento, no estoy al 100%, pero es cuestión de minutos. Ya me sentí mucho mejor sobre el campo. Lo que tengo que hacer es seguir cargando pilas y recuperar mi nivel de juego", dijo.

Márquez asume que las lesiones que sufrió durante la pretemporada -primero fue el menisco y luego un problema muscular- son la causa principal de que le haya costado "mucho más de lo normal" coger el tono físico. "O quizá sí sea por culpa de la edad", reconoció antes de mostrarse muy satisfecho del partido de Copa del Barcelona contra la Cultural Leonesa, y por varias razones. "Ganamos, me voy sintiendo cada vez mejor y, por vez primera en mi carrera, fui capitán del equipo en un partido oficial". Márquez ha jugado solamente seis de los 15 encuentros oficiales que ha disputado el equipo esta temporada.

Es el extranjero más longevo de la plantilla y tiene previsto quedarse dos años más: "Estamos de acuerdo con el club, prácticamente sólo falta la firma", reconoció ayer el mexicano, al regreso de León. Márquez termina contrato este año y en noviembre firmará una renovación que terminará en 2012. Para entonces tendrá 34 años. "Será mi último contrato a este nivel. Luego volveré a México a despedirme". Tipo callado y reservado, Márquez es respetado en el vestuario por su condición de veterano y, especialmente, como futbolista. Para el cuerpo técnico es insustituible y, si se encuentra en buenas condiciones, suele jugar. Hace mucho tiempo que Guardiola descubrió el sistema defensivo de Lavolpe con México y, al tiempo, reparó en Márquez. Además, sus características le convierten, según Txiki Begiristain, en un jugador único, de un perfil muy difícil de encontrar. Es normal que la afición de México le conozca como el emperador.

"Tácticamente es insuperable", señalan en el cuerpo técnico, que le valora mas allá de los minutos que juegue. "Rafa es el ejemplo de cómo deben jugar los centrales de la cantera", insisten los entrenadores azulgrana. "Siempre está en el sitio, es fuerte, la saca como nadie, es agresivo, ganador... Para mí es un referente", insiste Piqué, que también considera "incomparable" la grandeza de un futbolista que a menudo parece muy frágil, aunque los datos demuestran que nunca ha bajado de los 30 partidos por curso desde su primera temporada de azulgrana, la 2003-2004. Joan Laporta le puso en el mercado junto a Ronaldinho y Deco, pero acabó quedándose en el Barcelona. La decisión se tomó después de una reunión con Guardiola, que le instó a convertirse en la columna defensiva de su proyecto. Eso hizo: aunque llegó lesionado al tramo final de la temporada, participó en 37 partidos el último curso y lleva 225 disputados con el Barcelona.

Márquez se mostró feliz por el estreno oficial en el primer equipo de su compatriota Jonathan dos Santos, así como los del israelí Gai Assulin y el catalán Jonathan Soriano. Dos Santos ya había estado presente en una convocatoria de la Champions, pero en aquella ocasión no llegó a jugar contra el Dinamo de Kiev. Tanto él como Assulin son internacionales en las selecciones absolutas de sus países. El caso de Jonathan Soriano es muy curioso porque es un delantero formado en la cantera del Espanyol que, tras su paso por el Albacete, fue fichado por el Barcelona esta temporada para reforzar a su equipo filial.