Destellos de Flandes en la Real Fábrica
Última semana para ver la colección Selgas-Fagalde de tapices flamencos del XVI - El museo de la Casa de la Moneda muestra la exposición 'Arte postal'
Tan solo una semana queda a los amantes de emociones estéticas puras para deleitarse con la contemplación de Tesoros de Flandes en Asturias: tapices restaurados de La Quinta de Selgas. Se trata de una exposición, comisariada por Antonio Sama, conservador de la Real Fábrica de Tapices, que muestra en su sala Goya nueve excelsos paños flamencos procedentes de la colección Selgas-Fagalde. "Con certeza, uno de los repertorios tapiceros privados más importantes de España", explica Sama, que añade: "Es, quizá, la única colección particular española que dispone de palacete propio construido para albergarla, en el puerto asturiano de Cudillero".
Contemplar estas ricas colgaduras del siglo XVI, con escenas tan al gusto de la advocación bíblica flamenca, es ahora una ocasión única, habida cuenta de que pasan sus últimos días en la Real Fábrica de Tapices. En ella han permanecido desde 2007 para su conservación y cuidado, mientras culminaban las obras, rematadas ahora, de adaptación del pabellón asturiano donde se guardan. Dos de los tapices más celebrados son de gran formato, con escenas de las vidas de Jacob y de Tobías.
Todos los paños exhalan ese aroma inconfundible que a los mejores tejidos y los más polícromos tintes procuró la destreza de las laboriosas manos que los tejieron. Hasta la más diminuta hebra de cada tapiz conserva la pureza de un fulgor que destella desde la representación de excelentes cartones de los talleres bruselenses donde fueron confeccionados.
La sala Goya de la fábrica de tapices, con su cubierta de madera y sus muros desnudos en ladrillo sin revocar, les confiere la sinceridad mural exigida por tan ubérrimas colgaduras. La exposición se complementa con un relato gráfico sobre los tratamientos aplicados a los tapices que, en breve, emprenderán camino de regreso hacia la localidad asturiana desde la factoría madrileña. Por cierto, los jardines románticos de su fachada posterior han sido restaurados recientemente. En un plazo breve se mostrarán a los visitantes, según fuentes de la dirección del centro.
Justo enfrente de la calle de Fuenterrabía en su cruce con la de Julián Gayarre, Madrid esconde uno de sus tesoros arquitectónicos y escultóricos más recoletos, el Panteón de Hombres Ilustres. Muestra bellísimas tallas funerarias de próceres como Práxedes Mateo Sagasta o Antonio Cánovas del Castillo, cinceladas por artistas como Agustín Querol, Ponciano Ponzano o Mariano Benlliure. El acceso es gratuito.
A un paso del panteón y de la Real Fábrica, el Jardín Botánico ofrece al paseante una oportunidad única para presenciar, en todo su esplendor, el otoño madrileño. Es una explosión de colorido, visible en las copas del histórico arbolado desde el belvedere que domina el jardín neoclásico. Un museo de bonsáis recorre el mirador, con ejemplares cedidos por el rey de España y Felipe González, entre otros donantes.
Por otra parte, el Museo de la Casa de la Moneda muestra la exposición Arte Postal en su sede de Doctor Esquerdo, cerca de su cruce con la calle de O'Donnell. En ella se exhibe el bastidor artístico sobre el que reposa, aún, el universo de la correspondencia escrita.
Real Fábrica de Tapices. De 10.00 a 19.00. Domingo hasta las 14.30. Fuenterrabía, 2. Hasta el 31 de octubre.
Panteón de Hombres Ilustres. De 9.30 a 19.00. Entrada gratuita. Julián Gayarre, 2.
Arte Postal. De 10.00 a 14.00. Hasta el 8 de noviembre. Casa de la Moneda. Doctor Esquerdo, 36. Acceso libre.
Jardín Botánico. De 10.00 a 19.00. Entrada: dos euros. Plaza de Murillo, 2.
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