Ford convertirá a 700 temporales en fijos para desbloquear el convenioLa oferta de la empresa

Las nubes se abren sobre la planta de Ford en Almussafes. La compañía y el sindicato mayoritario, UGT, alcanzaron ayer un acuerdo sobre el nuevo convenio, que estaba encallado desde abril poniendo en riesgo los compromisos de inversión de la compañía para 2007-2013. La nueva propuesta pactada será sometida hoy al comité de empresa, donde UGT cuenta con mayoría, y se refrendará la próxima semana.

El proyecto de convenio presentado ayer por Ford España no se diferencia demasiado del que fue rechazado (por 2.542 votos frente a 2.427) en abril por la plantilla. Pero, sin embargo, ahora incluye una oferta de jubilación parcial que permitirá convertir a 700 empleados temporales (relevistas) contratados entre 2005 y 2008 en fijos.

Esta es una cuestión clave, ya que la supresión de este punto en la anterior oferta de convenio (en contra de los acuerdos alcanzados con UGT en 2007) fue la principal causa de que no fuera refrendada por la plantilla. También influyó de forma negativa el anuncio de supresión del turno de noche, cuyos trabajadores estaban ganando 6.000 euros más que el resto.

La situación de la mayor fábrica valenciana ha cambiado considerablemente desde la primera oferta de convenio, debido a la caída de la producción como consecuencia del desplome de las ventas de automóviles en toda Europa. El tercer turno ha desaparecido y los trabajadores afrontan ahora un nuevo expediente de regulación de empleo (ERE) de extinción de contratos para 600 personas.

Tras asumir que "la coyunturalidad es permanente", reconoció ayer una fuente de la compañía, Ford ofreció el miércoles unas condiciones muy favorables para quienes resulten afectados por el ERE: 400 de los 600 despedidos serán recontratados en un plazo de tres años, y mientras estén de baja cobrarán el 90% de su sueldo más antigüedad brutos; los 200 restantes se acogerán a prejubilaciones o bajas incentivadas. Todos los afectados lo serán de forma voluntaria. La oferta del convenio y las condiciones del ERE se votarán a la vez, lo cual hace prever esta vez un resultado favorable.- Conversión en fijos de 700 eventuales que han sido contratados entre los años 2005 y 2008.

- Incremento salarial del 2% para el próximo año, lo que según los cálculos de Ford implicará en la práctica un aumento de un 3% debido a la caída de un punto del IPC.

- Recontratación de 400 despedidos por el nuevo ERE: será a lo largo de los próximos tres años y durante el tiempo que estén en paro la compañía completará la prestación hasta llegar al 90% de sueldo y antigüedad brutos. Si la prestación por desempleo se agota, Ford asumirá el gasto para mantener el 90%. Al reincorporarse mantendrán sus condiciones actuales.El único fleco pendiente, según señaló ayer el secretario general de UGT en la planta, Gonzalo Pino, es que la empresa acepte el pago "retroactivo" de las cantidades a los trabajadores afectados por un ERE temporal anterior, aprobado en abril para 1.100 trabajadores, aunque en realidad no ha afectado a más de 300. El sindicato mayoritario y la multinacional acordaron que la empresa completaría el salario de los trabajadores que fueran al ERE. Cuando la plantilla rechazó la propuesta de convenio planteada por la empresa, sin embargo, Ford retiró ese complemento. UGT pide ahora que se compense a los trabajadores afectados.

La nueva oferta de convenio, que la compañía califica como "una garantía de empleo para la fábrica en cinco años", mantiene el incremento salarial acordado con UGT en 2007 en base a las previsiones del IPC del Gobierno. En ese sentido, Ford aplicará un aumento del 2% en 2009, que junto a la caída de la inflación en un punto supondrá "tres puntos de ganancia para los trabajadores", apuntaron ayer fuentes de la compañía.

El director de Fabricación de Ford España, Antonio Adés, se refirió a la propuesta como "uno de los mejores convenios ofertados en el sector de la automoción en nuestro país". En ese sentido, fuentes de la empresa recordaron que Seat ha congelado los salarios, que Nissan no los subirá y que la situación por la que atraviesa Opel no hace augurar incrementos.

Ford quiso contextualizar ayer la nueva propuesta de convenio en la situación que ha vivido la compañía desde 2006, cuando, sin que hubiese llegado la crisis global, empezó a perder dinero por un problema de sobrecapacidad. El volumen de producción alcanzado en esos años hubiese permitido "seguir abasteciendo el mercado con todas las plantas de Europa cerradas". La compañía puso en marcha un plan de concentración (One Ford) cuyo impacto en los Estados Unidos se saldó con 17.000 trabajadores en la calle.

La llegada de la crisis global complicó más las cosas. Los 18 millones de unidades vendidas al año en Europa cayeron a 13, con lo que Ford puso en marcha planes de reducción en todas las plantas para adaptar la capacidad a la demanda. El primer ERE temporal a la factoría de Almussafes llegó en septiembre de 2008. Luego llegaron otros y solo el repunte de demanda del nuevo Fiesta en el centro de Europa permitió aumentar la producción de 700 a 950 coches diarios.

Las ayudas del Gobierno a la compra de vehículos estimularon las ventas en el mercado nacional; sin embargo, cuando la fábrica estaba produciendo 1.460 coches diarios, la incertidumbre sobre su continuidad llevó a Ford a presentar el pasado 31 de julio el ERE de extinción de 600 trabajadores.

Una vez materializados los compromisos de inversión (500 millones) y producto (Fiesta, C-Max y el motor Ecobust de 6 cilindros) contemplados en el acuerdo de 2007, Adés consideró que con la actual oferta de convenio se da cumplimiento al resto de elementos contemplados: "Salarios, empleo, mejoras en competitividad, flexibilidad y compromiso a largo plazo".