38 millones de euros para transformar la ciudad
Para la puesta en marcha del Plan de Movilidad Sostenible se invertirán, entre 2009 y 2012, 38 millones de euros, de los que a este presente año le corresponden 24, destinados a la creación de la mayor parte de la nueva infraestructura viaria necesaria para el autobús y la bicicleta. En concreto, se han construido carriles-bus en siete calles del centro y el ensanche de Vitoria, mientras que se habilitan itinerarios para bicis en otras ocho vías.
El diagnóstico que señaló el plan, elaborado por la Agencia Urbana de Barcelona, es inapelable: el automóvil particular inunda Vitoria, la capital del desarrollo sostenible, la ciudad verde: 437 vehículos por 1.000 habitantes) en los que se realiza el 36% de los desplazamientos por la ciudad. En Bilbao y San Sebastián, el coche no alcanza el 20%. Como en todas las ciudades, el paseo a pie supone alrededor del 50% de los recorridos urbanos, y en Vitoria se cuenta con un estimable uso de la bicicleta, un 3,3% del total.
Para empezar a disuadir del uso del automóvil particular, el Plan propone la creación de supermanzanas, que distribuyen la ciudad en una red de vías básicas, por las que pueden circular los coches y la nueva red de autobuses; en el interior de cada supermanzana, la circulación estará limitada a bicicletas, peatones, vehículos de carga y descarga, ambulancias y particulares con garaje. De este modo, las calles internas se configuran como áreas de velocidad reducida, al mismo tiempo que remite paulatinamente el aparcamiento de vehículos en superficie.
Mejor la bicicleta
El estudio de la Agencia Urbana de Barcelona lo deja claro: hay que sustituir el automóvil por la bicicleta para los desplazamientos urbanos. Vitoria cuenta en la actualidad con 38 kilómetros de carril bici que se convertirán en 84 si se lleva a cabo el Plan. Con la nueva red, el 95% de la población tendrá acceso a una vía ciclista a menos de 250 metros de su domicilio. La nueva red contará con puntos de préstamo de bicicletas en el extrarradio, junto a los aparcamientos establecidos para quienes lleguen de fuera de la ciudad.
Por último, se trabaja en la recuperación de los desplazamientos a pie que, en la actualidad, suponen el 50% de los que se registran en Vitoria. Además de la creación de las supermanzanas, el plan recoge la creación de una red de movilidad peatonal preferente; es decir, que la ciudad se convierta en un entramado de itinerarios en los que el ciudadano que pasea sea el protagonista.
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