"Anatomía de Grey' tiene una pizca de culebrón que a la gente le gusta"

Alrededor de una veintena de personas deambulan con prisa de un lado a otro de una finca a las afueras de Madrid. Su objetivo: estar pendientes del más mínimo movimiento de Patrick Dempsey (Lewiston, Maine, 1966). El protagonista de Anatomía de Grey (Cuatro y Fox) ha hecho un viaje relámpago -"me han dejado venir pero tengo que volver al trabajo", aclara- para rodar el anuncio de un modelo de una marca de coches, su gran pasión.

Aquí es más conocido por el nombre de su personaje, el neurocirujano Derek Sheperd o doctor Macizo. Desde que a finales de 2005 se estrenó primero en Fox (dial 21 de Digital +) y semanas después en Cuatro, los espectadores han seguido fielmente el devenir de un grupo de médicos del ficticio Hospital Grace de Seattle. Especialmente la tormentosa relación entre la residente Meredith Grey (Ellen Pompeo) y Sheperd.

La sexta temporada se estrenó en EE UU con 17 millones de espectadores

Al actor el éxito le ha llegado en la madurez, lo que le ha hecho más consciente de que tanta popularidad probablemente no se vuelva a repetir: "Me doy cuenta de la oportunidad e intento sacar el máximo partido. Pero todas las cosas vienen en ciclos. La serie tiene su duración y yo sólo trato de disfrutar mientras dure y depués pasar a lo siguiente", dice durante un breve descanso del rodaje en el que concede la entrevista.

El jueves pasado, Anatomía de Grey estrenó en EE UU la sexta temporada. El mismo día que CSI y El mentalista, las tres ficciones más vistas de la última temporada. Y triunfó: 17 millones de personas vieron cómo se despejaban las incógnitas que había dejado el final de la anterior entrega. Dempsey aún no conocía ayer los resultados de audiencia, pero se mostraba confiado porque a su juicio la serie "está en un punto alto, y sus personajes, creciendo".

Dempsey cree saber los porqués del éxito de Anatomía de Grey: fue de las primeras series de médicos, su música, la química que hay entre el reparto, el hecho de que la gente se identifique con los personajes. También asegura que tiene "una pizca de culebrón que a la gente le gusta". El neurocirujano más famoso de la televisión cree que hay que ver la sexta temporada -en España habrá que esperar unos meses- porque es "una serie completamente distinta, los guionistas han cambiado el formato un poco". Además, parece que al fin deja la caravana: "Mi personaje se muda a un sitio diferente, lo que es muy interesante de ver".

Aparte de llevar a sus tres hijos al colegio, jugar con ellos y recoger sus juguetes, el actor pasa su tiempo libre con su mayor hobby: los coches. Este año ha corrido en Le Mans (Francia) y en circuitos de EE UU. "Pilotar te tranquiliza, me gusta el aspecto mental de mantener el control de la situación y no dejarte llevar por las emociones". Le gusta también por el compañerismo y la camaradería, y por algo que le delata como impaciente: "Ves los resultados inmediatamente, actuar es algo más abstracto, no sientes la satisfacción porque haces una o dos escenas pero no se sabes cómo ha quedado. Cuando conduzco, todo está bajo mi control".

Y para cuando el Grace eche el cierre, a Dempsey le hará falta un descanso. "Las jornadas de rodaje son muy duras". Quizás entonces se dedique de pleno a algo que ya le ronda la cabeza, la producción.