Preguntas a Barberá

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, se distanció ayer lo que pudo de la trama de corrupción que afecta a su partido, y de paso amenazó con nuevas querellas a quien pretenda relacionarla con el escándalo. "Yo tengo las manos limpias, como el mismo día que entré [en el Ayuntamiento]", aseguró en el pleno municipal después de que la portavoz socialista, Carmen Alborch, le planteara varias preguntas para despejar "cualquier duda" sobre su actuación.

Alborch quiso saber si la alcaldesa "tenía noticia de lo que sucedió en su partido en relación con la presunta financiación ilegal". La respuesta, breve y escueta: "¿Si tenía noticia? No rotundo. Un no rotundo". Fue la pregunta sobre la conversación en la que Álvaro Pérez, El Bigotes, afirmó que regalaba a la alcaldesa bolsos de lujo, la que encendió a Barberá. "Jamás he tenido relación ninguna con nadie de los personajes que se vienen a llamar la trama Gürtel", lanzó Barberá. Admitió que habrá saludado en algún mitin del PP al Bigotes, pero nada más. No recibió "ningún" bolso de Pérez ni otros regalos de "ninguna trama corrupta".

Visiblemente molesta, Barberá arremetió contra este periódico por publicar la información, recordó que se ha querellado, y advirtió a Alborch que estudiará si también actúa contra ella por la supuesta insinuación de que favoreció "por omisión" a la trama -Pérez decía en la grabación: "No nos da nada, pero tampoco nos hace nada"-. "He hecho una pregunta, y usted no me va a amedrentar", replicó Alborch, que insistió inútilmente en que aclarara si se ha querellado contra Pérez.