Fiesta musulmana en España
Probablemente Don Pelayo o Jaime I de Aragón, algunos de los protagonistas de la Reconquista, pensarían que su lucha fue vana, como lo afirma una web ultracatólica. Otra web, árabe, proclama en cambio, medio en broma medio en serio, que se ha dado el primer paso hacia una nueva Reconquista de España, esta vez por los musulmanes.
Cinco siglos después de la expulsión de los fieles del Corán, dos ciudades españolas van a incorporar una festividad islámica a su calendario laboral de 2010. La semana pasada el Ayuntamiento de Melilla lo pactó con las asociaciones islámicas y ayer el de Ceuta hizo otro tanto con su oposición política musulmana. El Aid el Kebir (Fiesta del Sacrificio) será fiesta oficial el 17 de noviembre. En ningún otro lugar de la UE se celebra una festividad religiosa no cristiana.
Ambas ciudades están gobernadas por el Partido Popular, que goza de mayoría absoluta. Su principal oposición no es el PSOE sino formaciones integradas por musulmanes, pero apenas confesionales. La mitad, al menos, de los que de verdad residen allí son musulmanes. Muchos de ellos votan. De ahí que las atenciones del PP no estén exentas de segundas intenciones electoralistas.
Bienvenidas sean. La convivencia interreligiosa saldrá ganando. Por ahora, los ayuntamientos ceutí y melillense han hecho apaños para añadir la fiesta musulmana sin quitar ninguna católica. No podrá ser siempre así. Será necesario sacrificar alguna para que los musulmanes puedan celebrar su Fiesta del Sacrificio. No en balde, recordaba la concejal Dunia al Mansouri, en el calendario laboral de Melilla había hasta ahora nueve fiestas católicas y ninguna musulmana.
La decisión tomada en Melilla y Ceuta es innovadora. Sus comunidades musulmanas son las únicas que saben con 14 meses de anticipación cuándo van a celebrar la gran fiesta. En los países musulmanes la fecha se suele establecer con poca antelación. Depende del ciclo lunar observado a simple vista. Fijarla por adelantado, echando mano de calendarios lunares científicos, supone modernizar el islam. Significa también, como resalta el portavoz de la Comisión Islámica de Melilla, "avanzar hacia un islam español, europeo".
