CC OO pide un nuevo pacto fiscal

CC OO pidió ayer a las administraciones públicas que revisen al alza los criterios fiscales. Su secretario general, Unai Sordo, hizo un llamamiento a los partidos y a las instituciones, para que sellen acuerdos que alumbren una nueva fiscalidad basada en la progresividad "más justa" de las rentas de trabajo, sobre todo de las altas, pero también de las de capital.

En concreto propuso subir los tipos marginales del IRPF a las rentas altas, dotar de progresividad a las rentas de capital, aumentar la tributación a las sociedades de inversión, y finalmente adoptar medidas más contundentes contra el fraude fiscal -en torno al 15% de la recaudación- según sus datos.

Aunque la competencia en materia fiscal reside en las diputaciones forales, el secretario general de CC OO apeló al Gobierno vasco y al Parlamento a impulsar un acuerdo interinstitucional en base a sus competencias de armonización.

Advierte a Confebask de que habrá movilizaciones si paran la negociación

La organización sindical consideró el incremento de la presión fiscal como una medida excepcional, pero justificada por la gravedad del momento económico. La recaudación fiscal ha decrecido más de un 20%, el consumo no remonta, y el empleo está llegando a cifras desconocidas desde hace quince años.

Si las políticas fiscales se han basado en la reducción de los tipos impositivos a medida que se incrementaba el crecimiento económico y los beneficios de las empresas, para CC OO ha llegado el momento de revertir la situación. "Quizás hay que fijarse en que los países que mejor están saliendo ahora de la crisis en Europa tienen una presión fiscal mayor", dijo Sordo para argumentar que un acuerdo para revertir la política "desfiscalizadora", sobre todo a las rentas más altas, y al Impuesto de Sociedades, no es ninguna locura.

Junto a esa situación, el sindicato augura que el otoño se presenta complicado, al seguir aumentando las cifras del desempleo tras el fin de las actividades estacionales. Pero además el "goteo" de los expedientes de regulación de empleo está reduciendo los ingresos de los trabajadores, y además la patronal Confebask "tiene la negociación colectiva paralizada".

Sordo criticó que prácticamente la mitad de los empleados vascos tienen pendientes de renovar sus convenios por la negativa patronal a afrontar las negociaciones. En ese contexto advirtió que "no renunciamos a activar nuevas movilizaciones si detectamos casos de resistencia en las patronales. Tampoco renunciakos a pedir incrementos sdalariales", dijo. No obstante, recalcó que su apuesta es por el diálogo social como la mejor vía para combatir el desempleo, reactivar la actividad económica y reforzar la protección social a los desempleados.