Messi, genio y figura

El disgusto por el sorteo no empañó la felicidad del Barcelona por los galardones recibidos por Xavi y Messi como dos de los cuatro mejores jugadores de la pasada edición de la Liga de Campeones. Xavi triunfó entre los centrocampistas, por delante de Iniesta, su compañero de equipo (35 votos por 25), mientras que Messi derrotó a Cristiano Ronaldo (41 por 19) y Eto'o (8) entre los delanteros. Valdés, por su parte, quedó por detrás de Van der Sar (18 por 22) entre los porteros y Piqué fue superado por Terry (13 por 20) entre los defensas. Repartidos los premios por puestos, Messi fue proclamado también el mejor futbolista del torneo. Aunque importantes, los galardones azulgrana de 2009 han sido menos que los de 2006, cuando Puyol, Deco, Eto'o y Ronaldinho coparon la pasarela Grimaldi.

Xavi, el 'número uno' en la Eurocopa, designado ahora mejor centrocampista

Nada nuevo, en cualquier caso, porque se cumplieron los pronósticos y el barcelonismo ha decidido desde hace tiempo que su fútbol se base en la solidaridad de la cantera, representada por Xavi e Iniesta, y en el liderazgo de Messi, sucesor de Ronaldinho y dispuesto a privar a Cristiano de cuantos trofeos le ganó la temporada pasada. La Pulga subió un escalón en Mónaco y es el máximo favorito para adjudicarse el Balón de Oro, el FIFA World Player y el FIFA Fifpro, títulos que últimamente se habían repartido futbolistas como Cristiano y Kaká. Messi ha dejado de ser el segundo o el tercero para ser doblemente el primero y coronarse como el rey del mundo futbolístico.

"Nunca me creeré el mejor jugador", advirtió el argentino nada más bajarse del podio monegasco; "únicamente me preocupa mi trabajo, seguir creciendo y, ahora mismo, que no se repita lo de la otra vez, que perdimos la Supercopa europea contra el Sevilla". A los 22 años, el currículo de Messi en la temporada 2008-09 fue inigualable: oro olímpico en Pekín con la selección de su país, se adjudicó el triplete (Liga, Copa y Champions)con el Barça. Y ahora acaba de ganar la Supercopa española. Marcó 38 goles (23 en la Liga, 6 en la Copa y 9 en la Champions) en 51 partidos y no se lesionó nunca.

Máximo goleador de la Copa de Europa y autor del 2-0 contra el Manchester United en la final, Messi también se ha distinguido como asistente (10 pases de gol) y sobre todo como delantero que barre el frente de ataque con facilidad para el disparo (175). La Pulga ha ejercido de falso ariete en las citas más importantes por decisión de Pep Guardiola. "A más presión, más feliz se siente Leo", dice el técnico, igualmente feliz por el éxito de la cantera azulgrana.

A su vez, Xavi se consolida como uno de los referentes del fútbol desde que fue elegido mejor jugador de la Eurocopa. Acaso queda la amargura en el Camp Nou de que Iniesta continúe sin ser reconocido en los votos como decisivo y de que a Valdés los técnicos le sigan mirando malamente.

Nadie puede discutir, en definitiva, el protagonismo de los azulgrana canteranos. Si Johan Cruyff llegó a contar con 12 en la temporada 1995-96, Guardiola ha dispuesto de 19 en el último mes, tras las incorporaciones de Fontàs, Muniesa, Jonathan, Thiago, Gai, Montoya, Bartra y Miño. La mayoría regresará al cuadro filial y de vez en cuando serán llamados para algún partido en el Camp Nou. Todos aspiran a seguir ahora el camino andado por Busquets y Pedro. El protagonismo de la cantera es además tan notorio en la nómina como en la producción porque los 17 goles que ha marcado el equipo en esta pretemporada corresponden a jugadores procedentes del Miniestadi, con Messi, obviamente, a la cabeza.

El éxito de Messi es, al fin y al cabo, el triunfo del Barça en su sentido más coral, amplio y formativo. Guardiola apuesta definitivamente por la cantera y, claro, por Chigrinski, al que eligió como mejor defensa de la Champions.