Jornada de consolidación de posiciones

Los inversores se debaten entre seguir a ciegas la corriente alcista de los mercados de valores o tantear su solidez de vez en cuando, como sucedió ayer. La excusa utilizada fue el escaso empuje de la Bolsa de Nueva York en los últimos días, que suscita demasiadas dudas sobre la solidez de las cotizaciones.

El Ibex 35 abrió la sesión con un excedente de inercia de los tres máximos previos, lo que le permitió subir en pocos minutos hasta un nuevo máximo anual en 11.446,10 puntos que la inesperada abundancia de papel dejó en máximo intradía. Al cierre de esta sesión el Ibex 35 quedó en 11.376,40 puntos, con un descenso del 0,45%.

Los grandes valores fueron, en general, los destinatarios de la cancelación de posiciones de unos inversores que dudan tanto de las posibilidades alcistas del mercado, como de lo acertado de salirse ahora. Por el contrario, los valores medianos y pequeños disfrutaron de los beneficios de la rotación de posiciones, con lo que el Ibex de los valores medianos subió el 0,42% y el de los pequeños el 0,35%.

La situación se repitió en la mayoría de las plazas europeas, a pesar de que los pocos datos publicados ayer eran positivos y apoyaban las expectativas de una pronta recuperación. El índice Ifo de confianza empresarial en Alemania subió en agosto, acumulando cinco avances consecutivos. En Estados Unidos sorprendió el índice de venta de viviendas nuevas de julio, con una subida del 9,6% que viene a confirmar la recuperación del sector inmobiliario gracias a unos precios muy atractivos. Los pedidos de bienes duraderos registraron en ese mismo mes la mayor subida en dos años, con un 4,9%.

Para la mayoría de los analistas, estos descansos en la tendencia alcista son lógicos, e incluso necesarios, para consolidar posiciones. El problema es que con la volatilidad existente, cualquier retroceso en las cotizaciones hace saltar las órdenes stop loss, que ahora abundan en el mercado y agrandan el proceso vendedor. Hay quien opina que eso también es bueno, ya que hace bajar algunos precios más deprisa y atrae a compradores indecisos, como sucedió ayer a última hora con los valores bancarios.

El negocio se mantuvo en los niveles del día anterior en el Mercado Continuo, con 2.414,07 millones de euros.