Una ópera dramatiza la vida sentimental de Britney Spears

La ópera siempre se ha nutrido de relaciones sentimentales enrevesadas y dramáticas. Hay quien ha querido recuperar viejas costumbres y elegido el género para imaginar el trágico final de una diva moderna: Britney Spears. Así nació Timberbrit, una ópera contemporánea firmada por Jacob Cooper, que tuvo un estreno menor este invierno y que ahora se está transformando en una gran producción que llegará la próxima temporada a Nueva York.

Cooper comenzó trabajando con la llamada técnica del time-stretching (estirar el tiempo). Al ralentizar una canción de Britney Spears, descubrió el efecto dramático que podía tener en temas ultra pop y versos como Hit me baby one more time ("pégame, mi amor, una vez más"). De ahí pasó a elaborar un pequeño guión. El argumento tiene un fuerte componente dramático inspirado en esas largas escenas de muerte que pueblan muchas óperas clásicas.

En Timberbrit, Britney Spears ofrece su último concierto poco antes de morir. Justin Timberlake regresa después de una larga ausencia para declararle su amor, pero al final ella opta por el amor incondicional de la audiencia y desprecia el de su antiguo novio. El libreto de Timberbrit está firmado por el escritor Yuka Ugarashi, que ha utilizado los mismos conceptos simples (sueños, lágrimas) que pueblan la discografía de la cantante: sueños. Como adelanto del trabajo de Cooper y su equipo destaca un vídeo, Worst fantasy, inspirado en el tema Toxic, y que los fans de la cantante ya se han ocupado de machacar en YouTube.