"Es cuestión de tiempo, no mucho"

Manuel Pellegrini no es el único al que no le gustó el Madrid que empató (1-1) el domingo en el estadio Bernabéu con Al Ittihad, saudí. Florentino Pérez tampoco se conformó con el poco juego desplegado por el equipo a pesar de la presencia de Cristiano Ronaldo y Benzema, dos de sus flamantes fichajes y, además, en el día de su regreso al palco.

Pero, mientras el técnico defiende el tipo de trabajo que está realizando y no se muestra preocupado por el estancamiento de sus jugadores, el presidente pone alguna que otra fecha en el horizonte. "Hay muchas cosas malas que corregir, pero no estamos en la época de mejorarlas. Estamos en la fase de fuerza y potencia y hasta que lleguemos a la de la velocidad será difícil abrir un hueco entre los defensas rivales y mejorar lo que hay que mejorar", explicó el chileno tras el partido. Ayer, 24 horas después, Pérez compareció en el Foro Ferrándiz-AS. "¿Que si me gustó el encuentro? Pues creo que en la segunda parte vimos el mismo equipo que el curso pasado", comentó. "Aun así, estos partidos sirven para lo que sirven y, además, faltaban los internacionales", matizó. Casillas, Sergio Ramos, Albiol y Kaká se incorporaron ayer, pero no debutarán hasta la gira por Canadá, dentro de diez días.

"En la segunda parte [contra Al Ittihad] vimos el mismo equipo que el curso pasado"

"Con Zidane también lo pasé fatal durante los tres primeros meses"

Al presidente blanco debieron de dolerle las similitudes con el Madrid de la temporada pasada. Primero, porque no se ha gastado 192 millones de euros en Cristiano, Kaká y Benzema para que el equipo siga por el mismo camino. Y segundo, porque su modelo deportivo, como él mismo dice, se alimenta de jugadores-inversión. Ese plus, para él, se basta por sí solo para que el conjunto recupere el lugar que le corresponde. "Cuando dejé el Madrid, en 2006, el equipo ocupaba el primer puesto en la clasificación de los clubes mejor valorados del mundo. En 2009 me lo he encontrado en el quinto. Eso quiere decir que se pueden ganar títulos [las dos Ligas y la Supercopa de España con Ramón Calderón], pero no ocupar el sitio que te corresponde", aseguró.

¿Y cómo se consigue eso? "Hay que tener jugadores que tengan la calidad mediática suficiente para seducir a los aficionados de todo el mundo. Esos jugadores-inversión son los que ganan un Balón de Oro o un Fifa World Player y, además de eso, tienen una trascendencia mediática internacional", enfatizó Pérez. Esos jugadores, que antes eran Zidane, Beckham, Figo y Ronaldo, ahora son Cristiano, Kaká y Benzema.

Pero Pellegrini, que es un hombre de fútbol y no de estrategias mediáticas, sabe que con eso no es suficiente. "Una cosa es tener una buena plantilla y otra amoldar un equipo que despliegue el juego que yo quiero", dijo el técnico el primer día en Valdebebas. "¿Qué margen considera oportuno?", le preguntaron ayer a Pérez. "Pues es cuestión de tiempo, pero no de mucho tiempo", soltó recordando lo mal que lo pasó con Zidane en sus primeros meses con la camiseta del Madrid. "Los tres primeros meses los pasé fatal. Todos decían que el equipo jugaba mejor sin él y yo pensaba: '¿Pero cómo puede ser si es el mejor del mundo?'. Íbamos los quintos por la cola...". En la décima jornada de aquella Liga (2001-2002) el Madrid de Zidane iba el décimo en la tabla.

"Hay que dar el tiempo necesario para que los grandes jugadores se adapten al juego colectivo, ya que a veces les sale la individualidad. Agosto será el mes clave y yo espero que para principios de temporada el equipo lleve el esquema de Pellegrini bien encaminado", añadió. Para ello no descartó fichar a un par de jugadores más: "Pero antes tendrán que salir algunos... La presión de una plantilla tan numerosa se hace inaguantable".

Pellegrini volvió a dejar fuera de la convocatoria para el partido de esta noche contra el Liga de Quito (22.30, La Sexta) a los tres con los que no cuenta: Heinze, Huntelaar y Van der Vaart.