Messi va por delante

Las cámaras del circuito de televisión del estadio de Wembley siguieron a Leo Messi desde la puerta del vestuario hasta el terreno de juego. Con el pelo mojado, dio sorbitos a un líquido azul, la última moda en bebida isotónica, del que se desprendió justo antes de pisar el césped del campo londinense por primera vez en su vida mientras el locutor anunciaba su nombre por la megafonía. Para entonces, en el inicio de la segunda parte, el Barcelona dominaba al campeón egipcio, Al Alhy, por 2-1 en un partido que concluyó con goleada: 4-1, tantos de Bojan, Rueda, Jeffren y Pedro.

Al minuto de entrar al rectángulo, Messi recibió el balón, lo controló y se llevó la primera patada. A los cinco, robó la cartera a los centrales ganándoles en el salto. A los diez, el mundo supo que el argentino ha vuelto: le tiró la pared a Pedro y el 10 le devolvió la pelota tocándola con el exterior de la zurda, dejándosela perfecta para que Pedro la recuperara a la carrera. El pase atrás terminó en gol de Jeffren, el tercero del Barça. "Me dijo que le buscara en el apoyo de la pared y ha salido bien", dijo Pedro, que jugó muy bien y marcó el cuarto tanto. "Pedro conoce la profesión de extremo perfectamente. Se queda en el equipo, ya no jugará con el filial", anunció Pep Guardiola.

"Está como una moto y ejerce de mejor jugador del mundo porque lo es", dicen en su entorno

Messi jugó de falso 9 y recibió bastantes patadas. Además, por las molestias que le impidieron jugar el viernes contra el Tottenham, se le instó a tomárselo con calma. Así que hizo jugar a sus compañeros mucho y él jugó lo justo. Tiempo habrá. Por el momento, le esperan tres partidos en Estados Unidos y el 16 de agosto un amistoso con Argentina. Antes del inicio de la Liga también le aguardan las Supercopas de España y de Europa, en Mónaco, donde está llamado a ser reconocido como el mejor jugador de la pasada Champions. "Está como una moto", reconocen en su entorno. Se le vio cómodo rodeado de los chicos de la cantera, a quienes dio consejos y trató con afecto. "Ejerce de mejor jugador del mundo porque lo es. Y eso incluye cuidar a los jóvenes. Lo sabe porque antes lo hicieron con él", destacan.

Messi se apuntó a la estadía en Marlow porque le vino en gana. Olió el balón y dijo que ya estaba harto de vacaciones. Cuando se despidió del equipo, dos días después de ganar la final de la Copa de Europa, llevaba la fecha de vuelta marcada en el calendario: 27 de julio. Era hoy cuando La Pulga debía volver al trabajo, pero llamó al entrenador y pidió permiso para hacerlo una semana antes. Por eso el martes viajó feliz a Inglaterra. Por eso ayer pudo debutar en Wembley. "Por eso es el mejor del mundo, porque tiene talento y le gusta trabajar", dice Henry. "Messi es un ejemplo, el espejo en el que se miran los chavales", añade Valdés. "Es el mejor y tiene margen de mejora", sostiene Tito Vilanova, ayudante de Guardiola; "tiene 21 años, mucho tiempo para seguir aprendiendo cosas, mejorar y ser aún mejor jugador". "Es un lujo tenerlo a tu lado. Con él todo es más fácil", reconoce Pedro. Tampoco se esconde Guardiola: "La diferencia con el partido contra el Tottenham es que en éste estaba Messi", sentenció Guardiola.

El once del Barça lo formaron Jorquera; Montoya, Henrique, Muniesa, Abidal; Víctor Sánchez, Rueda, Keita; Rochina, Bojan y Gai. También jugaron: Valdés, Dalmau, Cáceres, Fontàs, Espasandin, Touré, Gudjohnsen, Dos Santos, Pedro, Jeffren y Messi.