En manos de Dani

El Espanyol es una sociedad anónima deportiva pero tiene unos dueños bien definidos. El 51% de las acciones del club pertenecen a las mismas manos. Tras las capitales y sucesivas ventas de paquetes accionariales, el presidente Daniel Sánchez Llibre se ha convertido en el nuevo máximo accionista del club, seguido de cerca por la figura del vicepresidente, Ramón Condal.

Entre toda la directiva actual, el grupo ya tiene más del 50% del capital social del club. La continuidad de gestión está garantizada y, en caso de que se produzca la sucesión de Sánchez Llibre -aseguró hace tiempo que se marchaba, pero no hay fecha de caducidad y sólo se considera la posibilidad de Condal como relevo- la elegirá la propia directiva. Plenos poderes para Dani y sus consejeros. Así lo entiende hasta la oposición, que también ha vendido su paquete accionarial. El lunes al mediodía se cerraron los acuerdos. A las 13.30 horas, Espanyol 3.0, plataforma opositora blanquiazul, firmó la venta de sus acciones (el 5,83% del capital social) a Hemisferio, con la firma de Josep Crehueras, vicepresidente del Grupo Planeta y mano derecha de José Manuel Lara Bosch, hasta el lunes máximo accionista del Espanyol en los últimos 12 años.

"Por un lado, nuestra cuota accionarial ya no podía pelear contra la mayoría absoluta", reconoce Paco Asensio, portavoz de Espanyol 3.0; "pero también es un acto de generosidad porque siempre se ha reclamado unidad en el Espanyol y ahora no puede ser mayor". Horas después, Lara vendió sus acciones (siempre al mismo precio que le costaron), a Condal y a un grupo de siete personas, afines al presidente blanquiazul. Las acciones de Lara, sin embargo y para desdicha de la oposición, no se pusieron a subasta. "Sólo se las quiso vender a Condal y compañía", aseguran desde el entorno de la oposición.

Entraron en la operación, entre otros, los directivos Francesc Ciprés, August Newton, Josep Ramió y Sánchez Llibre. Con todo decidido, Lara avisó de la operación a diversos accionistas, por si se querían unir a su propuesta. "Nosotros vendimos antes las acciones a Lara y luego él vendió todas a Condal", remarca Asensio. "Era inútil pelear contra molinos de viento; queremos una entidad con los porcentajes accionariales repartidos", agregan desde Espanyol 3.0. Sánchez Llibre siempre ha defendido un Espanyol plural sin inversores extranjeros. Pero ahora cuenta con más acciones que nadie. Y puede hacer y deshacer a su antojo. El Espanyol está en sus manos.