Cierval ve amenazada la unidad de mercado por las leyes autonómicas
La patronal aboga por un cambio de modelo productivo no maximalista
El presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunidad Valenciana (Cierval), Rafael Ferrando, aseguró ayer que las diversas legislaciones autonómicas en materias relacionadas con la economía "rompen la unidad de mercado, dificultan el libre desplazamiento de los trabajadores y aumentan el gasto de las empresas". "La actual política autonómica puede poner en peligro la unidad del mercado español", afirmó ayer en su discurso en la asamblea general de la patronal valenciana, y conminó al Gobierno central a velar sobre ese aspecto en la financiación autonómica "por encima de intereses partidistas".
Ferrando enumeró una extensa lista de peticiones al Gobierno central (inversiones en infraestructuras, "la deuda generada por el aumento de la población y la prestación de servicios a ciudadanos de otras comunidades"...), incluso criticó sus "medidas populistas de dudosa eficacia". Sin embargo, no efectuó ni un reproche expreso a la Generalitat con su propio nombre, aunque se refirió a la falta de medidas suficientes para mejorar el plazo de pago a los proveedores de "las Administraciones Públicas". Con todo, exigió responsabilidad a los dos grandes partidos y los urgió a llegar a acuerdos para salir de la crisis.
El presidente de Cierval defendió la necesidad de impulsar un modelo de crecimiento basado en la mejora sustancial de la productividad, incrementando la competitividad y evitando el desmoronamiento de la construcción y los servicios. Tras su discurso en la asamblea general, Ferrando se mostró partidario de un cambio de modelo productivo "que no sea maximalista", ya que lo contrario llevaría a una transición de entre diez y 15 años.
"Es momento de hacer un análisis de hacia dónde se puede caminar, sin dependencia excesiva de los sectores que han ocasionado las dificultades y ese propio funcionamiento llevará adoptar medidas que supondrán la sustitución del modelo". Ferrando recurrió al ejemplo que puso Adolfo Suárez sobre el cambio político: "Sin que se caiga la casa, reformarla y cambiar las instalaciones".
Divergencia en la fusión
El presidente de Cierval, Rafael Ferrando, admitió ayer que en el seno de la patronal hay "criterios divergentes" respecto a la posibilidad de una fusión entre las dos principales cajas valencianas, Bancaja y CAM. Pese a ello, subrayó la gran coincidencia que existe en la organización respecto a que las dos cajas son un instrumento muy importante para la economía valenciana, por lo que a Cierval le gustaría que sus sedes decisorias se quedaran en la Comunidad Valenciana. Con todo, aseguró que el rechazo a la fusión entre las dos cajas radica en Alicante, mientras que hay sectores empresariales de la Comunidad Valenciana que la apoyan. Ferrando aseguró que las posiciones de las organizaciones territoriales "son muy similares, aunque hay distintos matices".
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