Los socialistas afianzan el cambio en los grandes núcleos urbanos

Cuando apenas han transcurrido tres meses de las elecciones vascas y uno de la puesta de largo del lehendakari Patxi López, las urnas se han vuelto a cruzar en el camino. Aunque el PNV ha ganado las elecciones al Parlamento europeo en la comunidad autónoma, lo ha hecho de una manera muy ajustada, nada que ver con las autonómicas, donde su triunfo fue incontestable. La oportunidad para volver por sus fueros tendrá que esperar. Y se ha aupado al triunfo gracias a los graneros de siempre, el voto de las localidades medianas y pequeñas, por debajo de los 30.000 habitantes. En cuanto a los grandes núcleos urbanos, sólo ha logrado vencer en Bilbao, por apenas 363 votos sobre el PSE, y en Getxo, dónde su victoria sí resultó más holgada.

El PSE y el PP creen que los resultados demuestran que el cambio tiene futuro

Pero en el resto de grandes localidades la victoria ha sido para el PSE. En algunas de ellas, doblando incluso los votos de los peneuvistas. A Vitoria y San Sebastián, las dos capitales con alcaldes socialistas, se han sumado Barakaldo, Irún, Portugalete, Santurtzi, Basauri, Rentería, Éibar y Sestao. Todos ellos municipios por encima de los 30.000 habitantes. Se trata de localidades en las que el PSE ha mantenido habitualmente la primacía, con algunos altibajos, pero que ahora le sirven para afianzar al nuevo Gobierno y proporcionarle "un impulso", según el secretario general del PSE de Vizcaya y portavoz parlamentario, José Antonio Pastor.

"La imagen del Gobierno vasco ha salido reforzada. De alguna forma, se ha refrendado el cambio. Y, lo que es más importante, se ha demostrado que tiene proyección de futuro y vocación de consolidarse en el tiempo". Los grandes ayuntamientos de la Margen Izquierda no han fallado. En Barakaldo (la cuarta localidad por población), el PSE ha cosechado casi el 44% de los votos, frente al 20% del PNV; en Irún los socialistas se han ido al 42% de los sufragios y en Portugalete al 41,6%. En Sestao, otra de los pueblos populosos, han conseguido el 44%, prácticamente el doble del PNV, que ha sido la segunda fuerza en todos estos municipios.

Para Pastor, el PNV se ha consolidado como un partido cuya fuerza reside en el medio rural, lo que debe hacerle reflexionar, en su opinión. "Los nacionalistas han desorientado a su electorado más moderado con los ataques tan virulentos al Gobierno cuando aún ni siquiera se había constituido".

El Partido Popular se mantiene como tercera fuerza, aunque la irrupción puntual de Iniciativa Internacionalista, para la que la izquierda abertzale pidió el apoyo, demostrando que su suelo electoral sigue siendo sólido, le puso en aprietos. Los populares también han logrado rentabilizar el cambio en Euskadi, aunque no han ganado en ningún municipio. Donde más cerca han estado ha sido en Getxo (27,57% de los votos y segunda fuerza) y en Vitoria (27,95% de los sufragios y también segundo partido). Para el secretario general de los populares vascos, Iñaki Oyarzabal, lo "significativo" de estas elecciones es que la suma de socialistas y populares sustenta y refuerza al nuevo Gobierno de Patxi López. Pero, sobre todo, Oyarzabal, pone el acento en los resultados en Álava, donde pujan por hacerse con la Diputación de Álava por medio de una moción de censura contra el actual diputado general, Xabier Agirre, del PNV.

Los resultados europeos han situado al PP en la segunda fuerza en Álava, por delante del PNV, y es la provincia donde más han avanzado en porcentaje de voto: 25,7%, frente al 21,3% de las elecciones vascas. "Los resultados refuerzan nuestra idea", recalca Oyarzabal, "de que el cambio en Álava es muy necesario". Los populares se muestran convencidos de que la tendencia al alza se mantendrá en las siguientes convocatorias electorales. "Hemos recuperado terreno", dice satisfecho el secretario general, quien recuerda que en las elecciones vascas de marzo el PSE les sacó 16 puntos y el domingo se quedaron en 10.

A falta de la valoración del Euzkadi Buru Batzar del PNV, que analizó durante la tarde de ayer los resultados en su habitual reunión de los lunes, el presidente de la Ejecutiva, Iñigo Urkullu, se ha aferrado al hecho de que el PNV ha sido el único partido distinto del PSOE y PP capaz de ganar en una comunidad.