_
_
_
_
Análisis:
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Juicio, chismes y cintas de video

Queda fuera de toda duda que una sociedad que se precie de ser democrática necesita tener sometidos a control a sus poderes públicos, entre los que está el ejercido por jueces y tribunales. Queda asimismo fuera de toda duda que una de esas formas de control es la que se realiza a través de una prensa libre, cuyo papel es esencial a la hora de difundir información veraz y como creadora de opinión pública.

Lo que no tenemos tan claro es que para algunos periodistas y medios de comunicación esté fuera de toda duda que ello deba realizarse de forma responsable, y lo decimos a la vista de lo publicado estos últimos días en relación con la suspensión en la Audiencia Provincial de Sevilla de un juicio por corrupción de menores.

Que las cintas no habían sido destruidas pudo ser comprobado por el tribunal del juicio la mañana de la suspensión. Ello fue puesto inmediatamente en conocimiento, al menos, de una de las partes, la acusación particular, por tener pendiente de precisar en un escrito lo que deseaba que fuera reconstruido. De hecho, en algunas de las primeras noticias publicadas sobre el asunto la misma tarde de la suspensión -provenientes de agencia y difundidas en ediciones digitales de algunos periódicos- se expresaba que las cintas podían no haber sido destruidas. Era, así, fácil contrastar con un mínimo esfuerzo lo realmente sucedido.

Pese a ello, lamentablemente -y lo decimos más que como jueces, como ciudadanos creyentes en la necesidad de una prensa libre, veraz y responsable-, sin contraste de la noticia ni averiguaciones de ningún tipo, reflejando un claro prejuicio acerca de la actividad de los tribunales y en algunos casos relacionando la noticia, no sabemos por qué (para ser sinceros, más bien preferimos no preguntárnoslo), con la cercana convocatoria de una huelga de jueces, en apenas un día la inmensa mayoría de los medios de comunicación convirtieron la noticia en un "error judicial" (como si toda disfunción relacionada con un proceso judicial sea achacable a los jueces) por "destrucción" de las cintas grabadas. Todo ello con acompañamiento, como es habitual, de una gran parafernalia de incendiarios artículos de opinión y editoriales quejosos de la actividad de los tribunales y reclamantes de depuración de responsabilidades.

Ceremonia de la confusión que llegó al extremo, si hemos de hacer caso a los mismos medios de comunicación, de que el ministro de Justicia remitiese lo supuestamente ocurrido a la competencia del Consejo General del Poder Judicial pareciendo, así, desconocer que los funcionarios a quienes compete la custodia de los documentos judiciales y piezas de convicción están integrados en su ministerio.

En síntesis, aun a riesgo de crear injustificadamente gran alarma social, en una especie de carrera a ver quién lo dice más rápido y más fuerte, se publicó como cierta la destrucción de las cintas olvidando la que debería ser una regla de oro del periodismo (si se nos permite la injerencia): "A veces ser el último en informar es mejor que estar equivocado", atribuida al Chicago Tribune después de errar al publicar que el ganador de las elecciones para la presidencia estadounidense de 1948 había sido Dewey y no, como era lo cierto, Truman.

Temerario comportamiento periodístico el descrito que no ha merecido autocrítica alguna hasta el momento. Dispuestos a depurar responsabilidades, ¿quién, cómo, cuándo podrían depurarse las derivadas de actuaciones periodísticas tan poco profesionales y tan faltas de veracidad?

Y como no queremos sumirnos en el profundo escepticismo que llevó, según algunos, a Graham Greene (periodista antes que espía y novelista) a definir el periodismo como "la tergiversación de la realidad en detrimento de la verdad de los hechos", hemos querido titular el artículo como lo hemos hecho, parafraseando, por aquello de mantener la sonrisa, el de aquella película de Steven Soderbergh. Esperemos que no quede en mero voluntarismo.

Javier González Fernández es magistrado de la Audiencia de Sevilla. Suscriben el artículo los magistrados Juan Romeo Laguna, Esperanza Jiménez Mantecón, Francisco Gutiérrez López, Francisco Guerrero Suárez, Ángel Márquez Romero, José Manuel Holgado Merino y Luis Gonzaga de Oro Pulido

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_