Un líder del PP dice que "los de EL PAÍS deberían ir a la cárcel", y luego rectifica

El presidente del PP de Alicante, José Joaquín Ripoll, disparó ayer contra el medio de comunicación que informa sobre la investigación de la trama de corrupción que salpica a más de una decena de dirigentes de ese partido. "Los de EL PAÍS deberían estar en la cárcel", espetó al valorar la información de este periódico sobre el caso Gürtel, que ha desembocado en la imputación por cohecho del presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps.

Ripoll, enfrentado a Camps por el control provincial del partido, hizo esas declaraciones en un desayuno de trabajo. El dirigente popular respondió así a la pregunta sobre el coste electoral que el caso Gürtel podría acarrear a Camps: "En Estados Unidos, un director de periódico reconoce quién es la fuente que le ha filtrado, o se va a la cárcel. No cabe en cabeza humana que el caso Gürtel esté en EL PAÍS. Los de EL PAÍS deberían estar en la cárcel".

Por la tarde, Ripoll pidió disculpas: "Cuando me he referido a que alguien debería estar en la cárcel, no lo hacía apuntando a directores de ningún medio sino a la persona que, de forma interesada, está filtrando el sumario", recoge una nota oficial. "Ningún periodista debería ir nunca a la cárcel y respeto la libertad de expresión, el derecho a la información y las distintas corrientes ideológicas de la prensa", añade.

"Abrir la veda"

El ataque de Ripoll a EL PAÍS fue replicado por la secretaria provincial del PSOE de Alicante, Ana Barceló, y por la Unión de Periodistas Valencianos. Barceló acusó a Ripoll de "abrir la veda contra los periodistas". El colectivo profesional destacó que la pretensión de Ripoll de encarcelar a periodistas "está fuera de lugar y supone un salto cualitativo grave en el debate público".

Antes de su ataque contra este diario, Ripoll admitió que la imputación de Camps sí puede ser un problema. "Si el proceso judicial sale mal, tendrá un problema", dijo. "O, mejor dicho, todos tendremos un problema", apostilló.

Las investigaciones de la parte valenciana del caso Gürtel continúan hoy con las declaraciones de una treintena de testigos relacionados con las mesas de contrataciones por las que en los últimos años han pasado las adjudicaciones a Orange Market, empresa dirigida por Álvaro Pérez, cabecilla de la red corrupta en la Comunidad Valencia, informa Lydia Garrido. El juez José Flors interrogará, entre otros, a Dora Ibars, directora general de Promoción Institucional de la Generalitat, a Vicente Farnós, director de Castelló Cultural, a Isabel de Villalonga, secretaria autonómica de Política Institucional, y a David Serra, vicesecretario regional del PP.