El PP se desmarca de un acuerdo político de medidas anticrisis

Finalmente, no hubo acuerdo global y no habrá un plan consensuado entre los partidos para aplicar medidas contra el desempleo y la crisis económica. El PP mareó la perdiz ayer durante tres horas de reunión para salir del encuentro y arremeter contra el Gobierno, y no pactar, ni siquiera, alguna de las 41 medidas que el documento de trabajo que, PSOE, IU y el propio PP, habían elaborado a lo largo de los tres últimos meses.

Las valoraciones de los asistentes a la reunión de ayer dejaron claro que el PP ha mantenido una estrategia de entretenimiento en esta negociación. A las siete reuniones mantenidas, incluida la de ayer, ha asistido con un baile de representantes que hacía prever su nulo interés por la consecución de un acuerdo.

Sólo el secretario general del PP andaluz, Antonio Sanz, junto a la portavoz popular, Esperanza Oña, sacaron una conclusión exclusivamente negativa de la reunión. Sanz acusó al Gobierno de haber mantenido una actitud de "ruptura" e "intransigencia", y denostó el documento de 41 medidas al afirmar que "no contiene ni una reforma". Tras calificar de "actitud lamentable" y "pena" la postura del PSOE y la del Gobierno, Sanz dejó abierta una puerta y ofreció el marco parlamentario para continuar el diálogo de las medidas que el Gobierno lleve a la Cámara. Situación sobre la que también Sanz dijo albergar serias dudas.

Por su parte, tanto IU como el PSOE calificaron de positivo el acuerdo alcanzado entre ambas formaciones que, aunque no alcanza a las 41 medidas del documento, sí puede cifrarse en más del 63%. Concretamente IU, representada por su coordinador Diego Valderas y su portavoz económico Pedro Vaquero, dijo estar de acuerdo en firmar ya 26 puntos del plan anticrisis. Valderas, sin embargo, emplazó al PSOE y al Gobierno a concretar nueve puntos para cerrar en sede parlamentaria un acuerdo más global.

En este sentido, IU pidió al Ejecutivo de José Antonio Griñán una mayor dotación económica para el plan y la concreción temporal y metodológica de las cinco leyes que incluye el documento, y de otras 15 medidas. Valderas exigió que la Ley de Vivienda, la de Agua y la de Renta Básica vean la luz parlamentaria en el presente ejercicio de 2009, y que la reforma del Régimen Local y la participación en los tributos de los ayuntamientos llegue al parlamento este mismo año para que tenga su reflejo presupuestario en 2010. "Si donde dijo digo el señor Pizarro (Luis) tiene que decir Diego, que lo diga", afirmó Valderas para, tras recordar al presidente Griñán su compromiso de investidura de avanzar en la reforma de la financiación municipal, criticar las recientes declaraciones del nuevo consejero de Gobernación, Luis Pizarro, que proponía aplazar la reforma de la Ley de Régimen Local.

Por su parte, la consejera de Economía y Hacienda, Carmen Martínez Aguayo y el portavoz socialista Manuel Gracia criticaron la actitud del PP. Gracia dijo que la estrategia del PP ha sido "peregrina", y que una vez más ha sido "el perro del hortelano, ni come ni deja comer".

Martínez Aguayo se comprometió ayer a negociar con IU un incremento de los fondos del plan -"priorizando el presupuesto y apretando más el cinturón", dijo- cuantificados ya en más de 5.500 millones de euros. La consejera dijo que no era capaz de entender ni explicar la actitud del PP. "Incluso he pensado que llegarían a algún acuerdo durante la reunión", señaló Aguayo, que dijo que trasladará inmediatamente a la Mesa de Concertación Social el documento, que "el Gobierno asume íntegramente".