Más autogobierno que hoy

La Diputación de Guipúzcoa festejó ayer sin alharacas, casi en la intimidad, el 30º aniversario de la reinstauración de la institución foral. El Gobierno formado por PNV y EA aprovechó la ocasión para realizar una defensa del actual sistema institucional vasco y expresar la "necesidad" de desarrollarlo en los años venideros sobre la base del "derecho irrenunciable" de los vascos a decidir su futuro. La sociedad debe impulsar "con firmeza" el autogobierno vigente y ampliarlo "sobre el principio del respeto a la voluntad mayoritaria y democráticamente expresada" por los ciudadanos.

Fue un acto frío y extremadamente sobrio, sin la solemnidad que tuvo el celebrado hace cinco años con ocasión del 25º aniversario, ocasión que se aprovechó para imponer las insignias de honor a los ex diputados generales José Antonio Ardanza, Eli Galdos, Imanol Murua y Román Sudupe, así como a la viuda de Xabier Aizarna, todos ellos del PNV. El Ejecutivo foral presidido por el también peneuvista Markel Olano se limitó ayer a leer una declaración institucional aprobada por el Consejo de Diputados. Sin invitados, Olano compareció ante los periodistas junto a los diez miembros de su gabinete.

La declaración recuerda que en junio de 1937 Vizcaya y Guipúzcoa perdieron el régimen foral tras ser declaradas "provincias traidoras" por los franquistas. Tras la dictadura, el 27 de abril de 1979 se constituyó la primera Diputación foral de la actual democracia y se conformó el actual sistema de autogobierno que ha permitido a Guipúzcoa y al resto de Euskadi alcanzar "un importante desarrollo político, económico y social", según recordó Olano.

El diputado general destacó que en estas tres décadas Euskadi se ha constituido en "una comunidad de progreso y calidad de vida", aunque aún "pesa la sombra de la pervivencia del terrorismo de ETA".