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Reportaje:

Cristiano Ronaldo tiene la pelota

Envuelto en críticas por su bajo rendimiento, el extremo del United se bate con el Oporto

Jordi Quixano

Su gurú físico es Carlos Queiroz, técnico de Portugal. "Tú, tranquilo", le insistía entre susurros y a hurtadillas desde su despacho del Madrid cuando entrenaba al club blanco hace seis temporadas; "si sigues el plan, llegarás a tono para la Eurocopa". Y Cristiano Ronaldo (Funchal, Portugal; 1985), extremo del Manchester United, asentía desde el otro lado del teléfono a su antiguo preparador. Queiroz regresó al United y Ronny explotó el curso pasado, solvente en el área contraria -batió el récord del club con 42 goles- e impulsando al equipo a conquistar la Champions y la Premier. Pero el 7 se ha difuminado hasta el punto de que sus bicicletas no descuentan rivales, los tacones resultan estériles y los adornos no pasan de eso, de adornos. Hoy se bate contra el Oporto en el estadio Do Dragão (2-2 en Old Trafford) y todas las miradas se centran en sus botas. El líder perdido ante su última oportunidad de convertir el ejercicio en exitoso.

Ferguson ya le ha recriminado en público su falta de aplicación en algunos partidos
"Cree que los árbitros no le protegen, pero no siempre tiene razón", dice el técnico
Esta temporada lleva en total 19 goles. Ninguno ha sido trascendental
"Se está machacando en el gimnasio para dar el salto", advierte su ex compañero Piqué

Desde Carrington, la ciudad deportiva del United, se repiten las señales. "Sé que se está machacando en el gimnasio y poniéndose a tono para dar el salto definitivo al final del curso", revela Piqué, futbolista del Barcelona que compartió equipo con el luso el año anterior. "Sin ninguna duda, tiene que llegar su mejor momento del año", interviene Lou Macari, un escocés que jugó 11 años en el United y que, además de amigo de Ronny, realiza programas en la cadena del United (MUTV); "es normal que no haya jugado como la campaña anterior porque se perdió la pretemporada". Fue por una lesión de tobillo. Cristiano recoge el testigo: "Estoy contento con mi temporada".

Pero para Alex Ferguson, que no ha digerido los dos últimos errores de Ronny, que acabaron en gol del contrario, no es suficiente. "Es duro cuando un jugador quiere entretener y no puede. Pero lo que no acepto es que regale balones", estalló esta semana. Una reprimenda que desde Manchester se entiende como arenga.

"Está un poco gris", revela Javier Garrido, lateral zurdo del Manchester City, que le secó en el enfrentamiento de esta temporada; "pero también es cierto que sufre muchos golpes y faltas". Ferguson tiene la réplica: "Cree que los árbitros no le protegen, pero a veces tiene razón y otras no". No es raro, en cualquier caso, que por los estadios de Inglaterra le abucheen al entender que simula faltas. "Sí que puede quejarse con el árbitro", asume Garrido; "pero la verdad es que con los rivales no cruza palabras fuera de tono". Carrick apostilla: "Nunca se ha peleado con nadie". Ni siquiera cuando reclamó y consiguió la tarjeta roja para Rooney en el Mundial de 2006. "Es un gran compañero", le define el propio Rooney.

Más famoso este año por aplastar un Ferrari cuando iba a un entrenamiento y por su ajetreada vida amorosa, al ganador del Balón de Oro y del FIFA World Player de 2008 le incluyeron ayer en la lista de aspirantes a mejor jugador del año para la Asociación de Futbolistas Profesionales de Inglaterra, galardón que ha obtenido en las dos últimas ediciones.

La camiseta del 7 es un legado en el Manchester United que no permite el sosiego. Best (1963-1974), Robson (1981-1994), Cantona (1992-1997) y Beckham (1995-2003) pusieron el listón muy alto. "En cuanto a habilidad e imaginación, es el mejor", le definió Ferguson el año pasado. Pero, por esos momentos, también entendía que sus recortes y cabriolas eran tan preciosas como determinantes. "Antes se perdía en regates, ahora resuelve partidos", aseguró el boss. Unas piruetas que, en ocasiones, sacaba de Youtube para luego practicarlas en los entrenamientos y ejecutarlas en los partidos. Cristiano también ha perdido puntería en los lanzamientos de falta y sólo se le recuerda su precioso gol ante el Blackburn en esta suerte durante la temporada.

"Es un monstruo por despertar", subraya Piqué. "Un fenómeno", añade Macari. "Aunque no está al nivel del año pasado, es muy vertical y peligroso. Sólo hay que mirar sus goles", ahonda Garrido. Suma 19 dianas (15 en la Liga, dos en la Copa de la Liga, uno en la Copa y una última en la Champions) en lo que va de curso. Pero, como le ocurre con la selección de Portugal -peligra seriamente su clasificación para el Mundial de Suráfrica 2010-, ninguno de relevancia o trascendental. El Oporto, que ya asustó al United en la ida, se antoja la última oportunidad del curso para Cristiano.

Cristiano Ronaldo, en el entrenamiento de ayer del Manchester United.
Cristiano Ronaldo, en el entrenamiento de ayer del Manchester United.AP

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