Griñán pide informes a los consejeros a los que no desvela su futuro

Tras su nominación por el comité director del PSOE como candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán se ha puesto a trabajar en su discurso de investidura, el próximo martes. Al día siguiente, intervendrá la oposición y saldrá elegido en primera votación con el apoyo de los diputados socialistas, que cuentan con tienen mayoría absoluta.

Griñán ha pedido a los consejeros que le den informes de este primer año de legislatura, pero no dio ayer ninguna pista, cuando ocupó su asiento a la derecha de Zarrías en la mesa del Consejo de Gobierno, de cuáles son sus intenciones para formar el Ejecutivo. Los consejeros están en ascuas e inquietos. Todo, por ahora, son especulaciones acerca de si cambiará la estructura del Gobierno y a quiénes elegirá para estos tres años.

En el PSOE escucharon con mucha atención sus palabras en el comité director, en el que habló de cambio y renovación, de contar con personas competentes y capaces que sirvan a los intereses generales, de los valores del mérito, la capacidad y la competencia que exigen las capas medias urbanas y de la educación como la principal política económica.

La pregunta que se hacen algunos es: "¿Tiene la Junta dinero en estos momentos para invertir en un área como la educación que no da réditos a corto plazo? No parece"; y otra: "¿Va a dejarle el partido manos libres para hacer el gobierno que apunta?". El secretario general del PSOE de Granada, Francisco Álvarez de la Chica, dijo en el comité director que había que dejarle "no sólo las manos libres, sino hasta los pies". Ya se verá cuando firme los decretos de nombramientos.