Hannah Montana, reina de los 'tweens'

Tienen de 2 a 17 años. Son la generación tween, un colectivo numeroso, entusiasta, casto pero lleno de hormonas y sobre todo con los bolsillos llenos. Un grupo que agasaja a su reina, Destiny Hope Cyrus, más conocida como Miley Cyrus o Hannah Montana, el nombre de la serie que hace dos años le dio la fama a esta joven de Tennessee de 16 años y que se ha convertido en un fenómeno cinematográfico con el estreno de su primera película. El filme es tan inocuo como su protagonista pero es el último reflejo de un imperio valorado en mil millones de euros que tiene a Cyrus como líder y que ahora suma 33 millones más a sus arcas gracias al gran recibimiento de la cinta en EE UU.

Sus amigos son los que mejor definen el fenómeno Cyrus. "No hay filtro entre lo que piensa y lo que sale por su boca", asegura su compañero en la cinta Jason Earles. Ésa es la naturalidad con la que se identifican los de su generación. La reacción normal a la era post Britney Spears, post Lindsay Lohan, post Paris Hilton. De ahí que el Viernes Santo, nada más acabadas las clases, se echaran al cine a ver en la gran pantalla el sueño de cualquier niña, la historia de una estudiante desgarbada de día (Miley Stewart) pero superestrella de noche (Hannah Montana). Cyrus es el último producto de una larga generación de niños Disney, desde Annette Funicello a Hayley Mills, pasando por Hillary Duff, Christina Aguilera o la propia Britney Spears. "Miley Cyrus es el modelo de una nueva generación de niñas y eso es algo que nos tomamos muy en serio", subrayó Christopher Lawrence, encargado del vestuario de un filme donde no existen minifaldas, ni ombligos al aire ni leggings.

El éxito de Hannah Montana: La película confirma el imparable éxito de esta joven que la revista Forbes sitúa entre las 20 estrellas más poderosas por debajo de los 25 años y que lleva camino de amasar mil millones de euros fortuna personal antes de cumplir los 18 años, pero que, de momento, disfruta de una paga mensual equivalente a 280 euros.