La policía implica al juzgado en la liberación de un preso peligroso

La investigación preliminar de la dirección general de la Policía y la Guardia Civil sobre la excarcelación por error del presunto agresor del productor de televisión José Luis Moreno en los juzgados de Alcobendas ha terminado. Y su principal conclusión es que en ella tuvo mucho que ver el juez, en contra de la información previa elaborada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que culpó a los agentes de liberarlo y pidió que los investigaran por ello.

Según el relato de hechos, la Guardia Civil condujo al albanés el pasado 31 de marzo, sobre la una y media de la tarde, a los calabozos de los juzgados de Alcobendas para ser puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 3, dirigido por el juez Javier Martín-Borregón. Previamente, el instituto armado había informado a la comisaría de esa ciudad del traslado del preso. Una vez allí, la policía informó al juzgado de que Bushi había llegado y el juez ordenó que lo subieran para interrogarlo.

Pero al terminar éste, según la investigación abierta por la Policía, el juzgado notificó directamente a los agentes el auto de libertad, recurriendo a un procedimiento "utilizado en los casos de 'detenidos', pero no habitual en el caso de las diligencias que afectan a un 'preso', ya que en esa situación el auto se notifica directamente al centro penitenciario", según un comunicado de la dirección general. Ésa fue la razón por la que los policías que lo custodiaban, "no habiendo recibido instrucciones específicas de la comisaría", cumplieron lo que ordenaba la resolución, es decir, "la libertad provisional" de Bushi.

La investigación interna asegura, además, que en la misma resolución se recogía la condición del albanés como "detenido" y no como "preso". El auto firmado por el juez Martín-Borregón dice textualmente que "aparece como imputado Astrit Bashi [sic] quien ha sido presentado en este juzgado en calidad de detenido y ha prestado declaración previa lectura de los derechos".

"Esta circunstancia, unida al inhabitual procedimiento utilizado en la notificación del auto y al desconocimiento por parte de los policías de la condición de preso de Astrit Bushi, indujeron al error que permitió su puesta en libertad", afirma el comunicado de la Policía, que considera que esa liberación "sólo fue posible por una suma de actuaciones erróneas y hechos anómalos que debe considerarse totalmente excepcional".

El pasado lunes, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Francisco Javier Vieira, anunció que ese órgano había archivado la información previa abierta el pasado fin de semana al no encontrar ninguna responsabilidad por parte del juez Martín-Borregón. Ese tribunal aseguró que la puesta en libertad de "un preso" sólo puede efectuarse en el centro penitenciario, previa notificacion del "mandamiento de libertad", sin el que el auto en el que se acuerda la medida carece de validez. Ese mandamiento fue enviado a la prisión de Valdemoro por el juez al día siguiente de la liberación de Bushi en Alcobendas.

Vieira decidió además enviar la investigación del su tribunal a los juzgados de Alcobendas por si los policías que lo habían liberado hubieran cometido un delito de infidelidad en la custodia de presos.