Washington y Seúl pactan una reacción conjunta ante la amenaza norcoreana
EE UU tiene indicios de que Pyongyang puede lanzar un misil mañana
Estados Unidos y Corea del Sur anunciaron ayer que están de acuerdo en presentar una respuesta "firme y unida" si Corea del Norte finalmente lanza lo que parece ser un misil balístico. Así lo expresaron Barack Obama y Lee Myung-bak tras reunirse solos por espacio de media hora al margen de la cumbre del G-20 que se celebra en Londres.
Corea del Norte ha anunciado que pondrá un satélite en órbita entre el 4 y el 8 de abril como parte de su programa espacial pacífico, y según indicaban ayer las cadenas informativas estadounidenses, Pyongyang ya ha comenzado a cargar de combustible un misil de largo alcance. Un portavoz de Defensa de EE UU confirmó que el Ejército tenía indicios de que el lanzamiento puede producirse mañana. Corea del Sur, Japón y Estados Unidos ven el lanzamiento como una prueba encubierta del misil de largo alcance Taepodong-2, que puede llevar una ojiva nuclear hasta territorio estadounidense.
Japón pedirá una reunión de la ONU si se realiza el lanzamiento
Tras la reunión de ayer, la presidencia surcoreana emitió un comunicado en el que se informaba de que ambos presidentes llegaron al acuerdo de seguir colaborando en el desmantelamiento verificable del programa nuclear norcoreano. Obama, por su parte, advirtió que EE UU consideraría "un acto de provocación" el lanzamiento del misil y convocaría al Consejo de Seguridad de la ONU. Japón adelantó que pedirá una reunión urgente. Anteriores resoluciones de la ONU prohíben a Corea del Norte realizar pruebas con misiles y detuvieron gran parte de su comercio de armas.
Por su parte, la oficina de prensa de la Casa Blanca resaltó que el encuentro entre Lee y Obama había sido muy satisfactorio y "cálido". "Corea del Norte no conseguirá abrir una brecha entre EE UU y Corea del Sur", aseguraba el comunicado, que elogiaba "la calma y la resolución" con que el mandatario surcoreano enfrenta esta crisis. Obama recalcó que Corea del Sur es uno "de los más estrechos aliados y mayores amigos" de Estados Unidos y agregó que ambos habían debatido varios asuntos, entre ellos "la defensa y la paz y estabilidad en la península coreana".
Un funcionario estadounidense citado por la agencia Reuters informó tras el encuentro de ambos presidentes en Londres que todo parecía indicar que Pyongyang seguiría adelante con la prueba, pero que Washington estaba haciendo todos los esfuerzos posibles para detenerla.
El lanzamiento por parte del régimen de Kim Jong-il será el primer gran desafío para el presidente Obama en su relación con Corea del Norte, cuyos esfuerzos por construir un arsenal nuclear han tensado las relaciones con Washington.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.