El Consell mantiene la urbanización que se justificó con Mundo Ilusión
"En este parque temático no nos va la salvación de Castellón", afirma Rambla
El vicepresidente primero del Consell, Vicente Rambla, no dejó ayer ninguna duda. "La urbanización seguirá su camino y tendrá su resolución cuando corresponda. No tiene nada que ver con Mundo Ilusión". De esta manera justificó la macrourbanización de más de 18 millones de metros cuadrados que, en su día, tuvo su aval gracias al proyecto de crear el parque temático de Mundo Ilusión en la provincia de Castellón. Un proyecto que el Consell acaba de enterrar.
Además, Rambla también aclaró que el proyecto de Mundo Ilusión no depende de que la urbanizadora ceda los 800.000 metros cuadrados sobre los que, en teoría, se ha de construir, sino que, aunque se ceda este terreno, el parque de atracciones no se hará si no hay un inversor dispuesto a llevar a cabo el proyecto. Así, Rambla señaló que, una vez se produzca la cesión de terrenos "habrá que calibrar las expectativas de ese proyecto, según la coyuntura económica, porque si no hay ningún inversor privado que en este momento decida acometer ese proyecto, tendremos que esperar".
Para los hosteleros, en Castellón se venden proyectos que no se hacen
Con la misma claridad, el vicepresidente primero del Consell rechazó llevar adelante el proyecto "simplemente por el hecho de que tengamos un compromiso anterior si vamos a causar un perjuicio a nuestra Administración, porque hoy el proyecto no está saliendo". El número dos del Consell obvió que, desde que se presentó la idea, han pasado 10 años y que en este tiempo nadie se ha interesado por el parque temático, mientras la Administración sí ha pagado sueldos e informes. Según Rambla, ha sido una cantidad de dinero "no importante" y que corresponde a lo que "se ha necesitado" para elaborar los informes que delimitaran las características, las posibilidades y la viabilidad de un proyecto que ahora consideran inviable.
La idea de construir un parque temático en Castellón fue lanzada por el presidente de la Diputación, Carlos Fabra, en 1999. Después de determinar su ubicación y viabilidad (que ha sido estudiada en varias ocasiones), un grupo de empresas constructoras locales presentó un proyecto para urbanizar el entorno. Entonces se libró la mayor batalla protagonizada por las constructoras de la provincia, hasta que en 2005 el grupo Marina d'Or logró la adjudicación del programa para urbanizar más de 18 millones de metros cuadrados. También fue entonces cuando la Generalitat asumió el proyecto. Desde entonces, solo se han hecho adelantos en la macrourbanización, pero no en el proyecto del parque.
"En este proyecto no nos va la salvación de la Comunidad Valenciana o de la provincia de Castellón", dijo ayer Rambla. Sin embargo, las asociaciones de empresarios turísticos no han acogido el anuncio con tanta racionalidad como la Generalitat y el gerente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Castellón, Carlos Gómez, calificó de "desoladora" la noticia que, a su juicio, confirma que "en Castellón siempre se venden proyectos que después no se desarrollan".
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