Imputado el director de FGV en Alicante por suplantar a un técnico

El director de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) en Alicante, José Pascual Rubio Alemany, está imputado desde hace casi un año por supuesto delito de falsedad en documento público u oficial. Un ex directivo, despedido dos veces por la empresa de transportes de la Generalitat, se querelló contra Rubio por haber suplantado supuestamente su personalidad para realizar un informe de valoración de ofertas de un contrato de obra pública por más de 450.000 euros, según consta en la denuncia. Ésta fue admitida a trámite el 22 de febrero de 2008 por el Juzgado de Instrucción número 5 de Alicante. La gerente de FGV, Marisa Gracia, declaró el pasado lunes en los tribunales en calidad de testigo por este caso.

García Barba fue despedido tras protestar por el cambio de valoración

FGV dice que revisó el informe porque el ex directivo eligió la oferta más cara

La compañía pública encargó a finales de 2006 a su entonces responsable de explotación en Alicante, Javier García Barba, que valorase las ofertas presentadas para la ejecución de unas obras de tratamiento de trinchera en la línea Alicante-Dénia por 497.800 euros. Se presentaron cinco empresas y el técnico redactó y envió un borrador de valoración a su superior Vicente Contreras por correo electrónico el 7 de enero de 2007, poco antes de iniciar un viaje privado al extranjero. García Barba dio la mayor puntuación a la firma Contesa.

A su vuelta del viaje se incorporó a FGV el 21 de enero y se enteró de que la obra había sido adjudicada a Tractores y Obras, SL, empresa de Altea que él había colocado en cuarto lugar, dado que su oferta presentaba una baja temeraria sin la adecuada acreditación. García Barba manifestó a la dirección su discrepancia con el cambio de valoración y, a continuación, le retiraron parte de sus competencias.

Mientras realizaba los trabajos de dirección de obra, García Barba se accidentó y permaneció de baja durante dos meses. Dos semanas después de recibir el alta, la dirección lo despidió por "su falta de implicación en la implantación del Tram en Alicante" y por realizar actividades que retrasaron su recuperación. El ex directivo niega la mayor ante el juzgado de lo social que ve su despido y en su defensa declara que incluso supervisó, estando de baja, trabajos para FGV. Por defectos de forma en el despido, la compañía se vio obligada a readmitirlo, para volverlo a despedir el 30 de septiembre de 2007, esta vez por "falta de rigor técnico" en su propuesta de valoración y por intentar anular la adjudicación a Tractores y Obras ante sus superiores.

García Barba sostiene su querella contra Rubio por supuesta suplantación en que estando él de viaje en el extranjero, el delegado de Alicante modificó su informe de valoración de ofertas, situando a Tractores y Obras como la mejor puntuada. Lo hizo en un documento interno que iba encabezado por el responsable de explotación -es decir, García Barba- y lo firmaba el delegado de Alicante de FGV debajo de las letras P.A. (por ausencia).

Un portavoz de FGV reconoció ayer la existencia de ese documento, pero precisó que la valoración de García Barba se revisó porque eligió "la más cara y con un plazo de ejecución más amplio". Por ello, la dirección de FGV encargó a Rubio que se elaborara un nuevo informe que rubricó Damián Uclés y donde Tractores y Obras fue la mejor puntuada.

Según el expediente de licitación, al que ha tenido acceso este diario, la oferta de Contesa es la más elevada de las cinco, a pesar de que rebaja en un 19,8% el presupuesto de licitación. Según el citado expediente, la obra acabó costando un 9,9% más de lo adjudicado y se demoró unas dos semanas sobre lo previsto.

Los dos juicios por despido siguen vivos. García Barba perdió el primero en primera instancia, lo ganó ante el TSJ y FGV lo recurrió al Tribunal Supremo en casación. El segundo, que García Barba ganó en primera instancia, también está recurrido, en este caso por las dos partes.