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El caos teatral de Loscorderos.sc llega a Ferrol

Viendo a tres de los cuatro actores cargar de allá para acá, con un muy elevado número de sillas -durante buena parte de la hora larga que dura el montaje- se comprende mejor la definición de "teatro físico" que acompaña a la presentación de Tocamos a dos balas por cabeza, la nueva producción de la compañía Loscorderos.sc que el pasado jueves se estrenó en Galicia dentro del Festival Alt de Vigo. Con la misma obra, la agrupación catalana, está hoy en Ferrol (Centro Torrente Ballester, 21.30 horas) y ocupará la sala Nasa de Santiago el próximo fin de semana, como parte de la programación del ciclo Zona Alternativa.

Las sillas con las que construyen (y deconstruyen) varias veces el escenario, afianzan la idea de habitar el gran teatro del mundo y hacia su sociedad nativa dirigen su mirada -a veces tierna y casi siempre irónica- los fundadores de la compañía, los actores David Climent y Pablo Molinero, junto con Nacho Vera y el músico Pablo Rega, en el papel de demiurgo sonoro. No sólo se dedican al transporte estos personajes -que tienen un poco de todo el mundo sin parecerse a nadie en particular- también cantan, bailan, tocan cierta variedad de instrumentos y hablan, casi sin parar, un idioma repleto de expresiones coloquiales, de tópicos vueltos del revés y de surrealistas asociaciones con profundidad poética y carga humorística.

El absurdo controlado

Las tradiciones sociales, y el primitivismo de nuestro ser animal, provocan un conflicto no resuelto, más allá del epitafio que desvela el título de la pieza. En uno de los momentos más claros del montaje, alguien dice: "Sube los hombros, recoge el labio, mete la tripa". Y en cuanto termina la frase estalla un globo, con todo su estrépito. "Nadie se pregunta el porqué de los rituales, que se siguen repitiendo absurdamente cuando la cultura es producto de la evolución", explica Climent.

Dado que no existe la acción y el texto, incongruente a propósito, cobra la misma importancia que cualquier otro elemento dramático, para atrapar al espectador en su escalada. Loscorderos.sc se apoyan en el ritmo acompasado con el que toda su artesanía teatral late al unísono. Climent cree que esos son sus rasgos definitorios: "Necesitamos esa formalidad para que el absurdo no se dispare y este caos pueda ser compartido". El cartel del Festival Alt depara esta noche a Ernesto Collado en una Conferencia optimista en el Museo de Arte Contemporánea.

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