El PP se encomienda al cierre de filas

El PP sabe que lograr un buen resultado en las urnas el 1 de marzo depende en buena medida de que sea capaz de movilizar a todo su electorado, más que de arrebatar votos a sus rivales. Por ello, relativamente satisfechos por el resultado de las encuestas, pero sin dejar de mirar de reojo a UPyD, especialmente en Álava, los populares iniciaron ayer y acelerarán toda esta semana el cierre de filas para asegurarse cada voto de los suyos.

El candidato Antonio Basagoiti y su presidente nacional, Mariano Rajoy, marcaron ayer la pauta de ese mensaje en el mayor, y más cuidado en su montaje, mitin que el PP va a organizar en esta campaña. Unas 2.000 personas, algunas llegadas de otras comunidades, llenaron una de las salas del BEC baracaldés para escuchar a Basagoiti decirles que en un momento de "crisis de valores y de economía es más importante que nunca acertar en el voto". Rajoy, en un largo discurso teñido de cierto populismo, se dirigió directamente a todos los votantes que apostaron por el PP en Euskadi en las generales de hace un año para que repitan su opción.

Basagoiti: "Es peor momento que nunca para sortear el voto, para regalarlo"

En marzo de 2008, el PP logró en Euskadi 209.000 votos. Hace cuatro años, con una participación cuatro puntos superior, sus 210.000 votos le reportaron sus actuales 15 escaños. De ahí que el mensaje para el resto de campaña de Basagoiti, quien ha trasladado a los suyos que rebajen su inquietud por UPyD, se resume en una de sus frases de ayer: "Es peor momento que nunca para sortear el voto, para regalarlo, para tirarlo a la basura o para dárselo a la gente que no es de fiar".

Con la defensa de las libertades y la crisis como ejes de nuevo de sus intervenciones, el candidato y Rajoy no dejaron de tocar ninguna de las cuestiones sensibles para el electorado popular en todo su abanico ideológico. Así, se fueron sucediendo los mensajes sobre la mala situación económica y el paro; las críticas a socialistas y nacionalistas, separados y al alimón; la necesaria derrota de ETA, más presente en el discurso que en otras ocasiones ("Nosotros estamos en la derrota del terrorismo y ellos a sus poltronas", recalcó Basagoti); la defensa de la libertad de los padres para elegir cómo educar a sus hijos o la apuesta por la normalidad del País Vasco como parte fundamental de España. Por ello, debe votar al PP "quien se sienta español y quiera seguir sintiéndose español, quien quiera que haya un Gobierno que arregle la economía, quien quiera que se derrote a ETA y quien quiera que su hijo estudie en el idioma que quiera", resumió Rajoy

Sólo un PP fuerte, reiteraron ambos, hará posible un cambio "real". Así que ninguna alusión a posibles pactos -el PP insiste una vez y otra que los socialistas buscarán al nacionalismo- y a volcarse en la movilización propia. "Queda solamente un esfuerzo", concluyó Rajoy.