"A algunos el Mundial les ha superado"

No es cuestión de esconder la cabeza bajo la arena como el avestruz. Valero Rivera, el nuevo seleccionador español de balonmano, nunca lo ha hecho. Ayer, ya de viaje hacia su peor calvario (España jugará por el puesto 13º en el Campeonato del Mundo de Croacia), el técnico que ganó 70 títulos con el Barcelona se confesó. "Éste era mi equipo y asumo la responsabilidad. Pero en algunos casos [en alusión a jugadores concretos], el Mundial nos ha superado. Este resultado me obligará a replantear mi idea inicial del equipo".

Campeona mundial en 2005 y bronce olímpico en 2008 con Juan Carlos Pastor, la selección española nunca había caído tan bajo en un Mundial. "No es normal", reconoce Juan de Dios Román, elegido presidente de la federación el pasado diciembre; "los resultados responden a algo más que al hecho de la renovación del equipo. El abismo está entre un mal resultado, que puede ser el séptimo o el octavo, y nuestra situación actual".

Buscando las causas del fracaso, los dos técnicos coinciden en que la falta de tiempo de preparación fue determinante. "No logro entender que Ricondo planificara las elecciones a un mes del Mundial", explica Rivera; "cogí la selección el 2 de enero. No hubo tiempo para nada. Todo estaba cogido con pinzas y estuvimos prácticamente sin zurdos porque Víctor Hugo no estuvo bien y Malmagro se lesionó en Algeciras. Decidí llevarme a un tercer portero, Sierra, porque se lo había ganado".

La pregunta es por qué no estaban en el equipo hombres fundamentales como el central Chema Rodríguez, el lateral Demetrio Lozano, el pivote Julen Aguinagalde y el central Dani Sarmiento: "Hice el equipo pensando en aquéllos que se ajustaban a mi concepto del juego y que me ofrecían una perspectiva hacia los Juegos de Londres 2012. No fiché para ganar este Mundial, sino para hacer un equipo ganador en el futuro. Pero, tras lo ocurrido, es evidente que algunos que no han estado aquí tendrán más posibilidades de estar en la selección".

"Las renovaciones deben hacerse sin perder el norte. Igual en nuestro equipo faltaba equilibrio entre la juventud y la experiencia para la exigencia de un Mundial. Sin embargo, algunos jugadores expertos no contribuyeron mucho", razona Román. Y Valero agrega: "Tal vez debimos venir con menos gente joven".

En España falló todo. Jóvenes y veteranos sucumbieron a la tensión y desacreditaron el poder de la Liga Asobal. ¿Un problema de calidad o de fortaleza mental? "La historia nos dice que, en ocasiones, las situaciones adversas se han superado y se han ganado medallas", afirma Román. Pero esta vez España fue un equipo mediocre, incapaz de remontar un partido y de jugar con calma.