La JSC exige el cese del secretario de Juventud si no cambia las ayudas a ERC

A nadie parecen gustar los criterios que utiliza Eugeni Villalbí, secretario de Juventud del Gobierno catalán, a la hora de repartir las subvenciones anuales de su departamento. Hay una excepción, su propio partido, las Joventuts d'Esquerra Republicana (JERC), que este año se han llevado buena parte del pastel, y cuyo consejo nacional presidió Villalbí entre 2003 y 2005, además de ser responsable del área de Asociacionismo y Movimientos Sociales. El primer secretario de la Joventut Socialista (JSC), Raül Moreno, exigió ayer a Villalbí su cese si el próximo año no atiende a criterios más objetivos cuando se ponga a repartir dinero. Lo mismo pidieron los cachorros de Iniciativa per Catalunya Verds -Joves d'Esquerra Verda- y Convergència i Unió. Su diputado Albert Batalla reclamó la comparecencia parlamentaria del responsable de Juventud y calificó de "episodio propio del camarote de los hermanos Marx" que los socialistas pidieran la dimisión de un miembro de su propio Gobierno.

Lo cierto es que Raül Moreno sí solicitó la dimisión de Villalbí ayer por la mañana. Pero horas más tarde, después del revuelo que provocaron sus declaraciones, Moreno recibió un público tirón de orejas por los mayores de su partido. En una nota remitida a este periódico, el dirigente de la JSC se desdecía de su petición, aunque mantenía sus críticas a la Secretaría de Juventud. Las Joventut Socialista exige criterios más claros -como por ejemplo la representatividad de cada partido- para repartir las ayudas y así se lo comunicaron, este año, al propio Eugeni Villalbí. Moreno, además, aseguró tener pruebas que desde Juventud no sólo se premia a las JERC, sino también a las concejalías de juventud en los ayuntamientos gobernados por los republicanos. "No hay un reparto justo del dinero público para las organizaciones", declaró a Efe.

El secretario general de la Joventut Nacionalista (JNC), de Convergència, Gerard Figueres, denunció la "discriminación brutal" que aplica Villalbí al frente de la secretaría y consideró "escandaloso" que a su organización se le denegara una ayuda para la organización del congreso de las juventudes liberales europeas. José Antonio Coto, presidente de Nuevas Generaciones, consideró "inaceptable" que no tenga en cuenta la representatividad política como regla para el reparto de subvenciones.

Desde el Departamento de Acción Social rechazaron ayer que se hubiera primado a las juventudes de Esquerra en las ayudas económicas [véase cuadro] y precisaron que si esta organización recibió más dinero fue por el hecho de que presentó más proyectos. Estas organizaciones también reciben dinero a través de unos convenios en función de su representatividad, en los cuales la JNC sale beneficiada.