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Tribuna:Economía global
Tribuna
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Oportunidades en la crisis

América del Sur, que había pasado sin mayores problemas la primera etapa de la crisis, ha sido golpeada con fuerza desde finales de septiembre. En esa fecha se globaliza la restricción del crédito, lo que se manifestó en la interrupción de las líneas de préstamo para financiar el comercio exterior y, simultáneamente, se consolida la percepción de que Estados Unidos, Europa y Japón se encaminan a una recesión. Con ello cayeron dramáticamente los precios de las materias primas y subieron las primas de riesgo de los países emergentes. América Latina absorbió bien la interrupción de los flujos de crédito para comercio exterior. Los bancos centrales de la región usaron una fracción de sus abundantes reservas internacionales para reemplazar el financiamiento perdido y proveer liquidez, tanto en dólares como en moneda local, a los bancos locales.

Hoy estas operaciones se han normalizado, aunque a costes más elevados, reflejando los aumentos de las primas de riesgo. La nueva situación se ha traducido también en fuertes caídas en las monedas de los países de América del Sur. Ello ha retrasado el progreso en la reducción de la inflación, pero ha dado una clara señal de precios a las empresas y consumidores de cada país respecto de dónde hay que asignar los recursos en un contexto internacional más complejo. Estas depreciaciones no han sido traumáticas, como en casos anteriores, gracias a la mayor flexibilidad de las instituciones y de las políticas públicas en la región.

Por último, vemos que los ingresos de los Gobiernos están cayendo ante las menores rentas procedentes de las materias primas. Sin embargo, a diferencia de crisis anteriores, la gran mayoría de los países de la región cuenta con fondos acumulados en los periodos de bonanza, lo que les ha permitido mantener sus planes de gasto en una primera instancia, e incluso, como acaba de ocurrir en Perú, formular programas de inversión extraordinaria para paliar los efectos negativos de la recesión internacional.

Esperamos que en los próximos meses y años, que serán muy difíciles para la economía mundial, aquellos países de América del Sur que hicieron reformas de fondo y han mejorado sus instituciones, su forma de hacer política económica y su solvencia, van a tener un desempeño positivo. Por primera vez en más de un siglo, estos países van a crecer en medio de un mundo sumido en una recesión. Esto sin duda va a cambiar las percepciones de riesgo de la región, y cuando la economía mundial vuelva a la normalidad, ese comportamiento va a ser reconocido, facilitando un mayor acceso a capitales, lo que se debería traducir a su vez en mayores oportunidades de crecimiento para la región.

Por primera vez en más de un siglo, los países de América del Sur que reformaron sus economías van a crecer en medio de un mundo en recesión.

Joaquín Vial es economista jefe para América del Sur del servicio de estudios del BBVA.

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