Pumpido pide informes policiales del grito de Tardà contra el Rey

El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, acordó ayer que la fiscalía de Cataluña recabe de los Mossos una información sobre el acto y las circunstancias en que tuvo lugar el pronunciamiento de Joan Tardà contra el Tribunal Constitucional y el rey Juan Carlos, para ver si puede haber materia penal.

Fuentes de la Fiscalía del Estado indicaron que las únicas referencias que tiene el ministerio fiscal de lo sucedido son informaciones periodísticas y la fiscalía no puede actuar directamente sobre noticias de prensa en las que se discute lo afirmado por Tardà y el sentido en que lo dijo. Por tanto, antes de saber si procede actuar o no, necesita un informe que recoja la versión oficial de lo acontecido en el mitin, que se encargará a los Mossos.

Las mismas fuentes indicaron que a tenor de las primeras informaciones la cuestión podría ser competencia de hasta tres fiscalías distintas: la fiscalía de Cataluña por razón del territorio; la de la Audiencia Nacional, por razón de la materia si hubiera indicios de un delito contra la Corona, y finalmente la del Tribunal Supremo, por razón de fuero de Tardà como diputado.

Las fuentes fiscales consultadas no prejuzgaron si puede haber o no materia penal, y dijeron que al percibir una cierta solicitud social para que la fiscalía actué, se ha decidido abrir una información y a la vista de la misma se resolverá.

Por otra parte, el presidente del Congreso, José Bono, manifestó ayer que el diputado de Esquerra Republicana "no es un desalmado", aunque tal vez sea "algo primario en su modo de manifestarse". En medio de una vorágine de críticas al parlamentario independentista, Bono quiso disculpar sus palabras de "muerte al Borbón" porque, dijo, "todos podemos cometer un error" y Tardà ya había pedido disculpas. De hecho, el presidente del Congreso tenía información de primera mano y reveló ayer que el mismo Tardà le había llamado por teléfono para disculparse.

Según Bono, el número dos de Esquerra en el Congreso le trasladó que no desea "ningún daño" al Rey, ni atribuir un delito al Tribunal Constitucional cuando aseguró que este órgano está "corrupto".

El PP, a través de su portavoz en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, subió la intensidad de la polémica y apuntó que las disculpas del diputado de Esquerra son "insuficientes". Por ello, el PP exigió al PSOE y al Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) que rompan su "silencio cómplice" y expliquen por qué gobiernan en Cataluña con los independentistas de ERC. "Nada justifica un tripartito con unos compañeros que arremeten contra el modelo de convivencia", remachó la portavoz popular.