Condenado un catedrático por usar parte de un artículo que escribió con otra profesora

La disputa por un trabajo académico ha terminado dirimiéndose en los tribunales, con una condena por plagio para un profesor por copiar parte de un artículo que publicó junto a una colega. El juzgado de lo Mercantil número uno de Alicante condenó el pasado 6 de noviembre a José Miguel Martín Martínez, director del Laboratorio de Adhesión y Adhesivos del Departamento de Química Inorgánica de la Universidad de Alicante y catedrático del departamento, por plagiar en un artículo publicado en una revista internacional parte de otro trabajo realizado anteriormente junto a la demandante, Mercedes Pastor, profesora titular del mismo departamento. Entre uno y otro artículo científico distaron dos años.

La denunciante trabajaba en un grupo dirigido por el profesor

La sentencia, que estima parcialmente las peticiones de la profesora denunciante y sobre la que cabe recurso, también condena a la coautora del artículo impugnado, María Dolores Romero Sánchez, profesora de la universidad hasta el año 2004. El juez condena a ambos a abonar 2.000 euros de indemnización "por daño moral por plagio".

La polémica en cuestión se centra en dos artículos publicados en inglés: uno resultado de la colaboración de la demandante y el demandado, y que apareció en 2004 en la revista The Journal of Adhesion, y un segundo publicado en 2006 por los demandados en The European Physycal Journal.

En su demanda, la profesora argumenta con pruebas el plagio de parte del primer artículo mencionado, "sin que se le haya pedido autorización para tal publicación ni incluido su nombre como coautora". El catedrático, por su parte, solicitaba la desestimación del caso al considerar la inexistencia de infracción alguna, esgrimiendo que el segundo artículo en liza "es original al implicar una creación literaria novedosa consistente en tomar los datos de otras publicaciones previas y darle un enfoque diferente, únicamente realizado por él". Y la segunda demandada, finalmente, argumentó en su defensa que su labor se limitó a "realizar ajustes meramente estéticos y tipográficos" al texto.

El juez, en su resolución, considera que el catedrático "se arroga en exclusiva los derechos de autor de obras realizadas en colaboración con otros profesores dependientes del departamento universitario que dirige, marginando los derechos de estos". Añade el magistrado a renglón seguido que esta situación puede explicarse, pero "no justificarse", por las "malas relaciones existentes entre ambos y que han dado lugar a procedimientos penales". La profesora demandante, de hecho, interpuso en 2006 otra denuncia por acoso laboral contra el catedrático, según asegura.