Orozco supera la moción de confianza gracias a la abstención del Bloque
No hubo sorpresas en el pleno extraordinario celebrado ayer en el Ayuntamiento de Lugo para debatir la moción de confianza propuesta por el alcalde socialista, Xosé López Orozco, vinculada a los presupuestos. El gobierno en minoría del PSdeG-PSOE superó la moción y sacó adelante los presupuestos de 2009, gracias a la anunciada abstención de los cuatro concejales del BNG.
La decisión de los ediles nacionalistas, ya anunciada el pasado fin de semana, cortó de raíz la posibilidad de una moción de censura que hace unos días había insinuado el presidente provincial del PP, José Manuel Barreiro, como salida a la situación que hubiese planteado una derrota del alcalde en el voto confianza y el bloqueo de los presupuestos para el año próximo. Finalmente López Orozco ha salido airoso del envite: no sólo consiguió aprobar las cuentas de 2009, sino que la sesión de ayer sirvió para que PP y BNG consumiesen buena parte del debate enfrentándose entre sí. La brecha entre populares y nacionalistas contrasta con lo sucedido hace ocho días cuando en el mismo salón municipal de plenos la oposición unió sus votos para rechazar los presupuestos del gobierno municipal socialista.
En el rifirrafe entre populares y nacionalistas, el portavoz del PP, Joaquín García Díez, hizo uso del símil agrario que una semana atrás había utilizado el portavoz nacionalista, Xosé Anxo Laxe, quien comparó los presupuestos rechazados, con un buey "desnutrido y flaco". "¿Qué precio se ha pagado para no devolver el buey al establo?", se preguntó el portavoz popular. "El buey sigue teniendo todo lo que se dijo y encima huele mal", concluyó. El PP había apoyado el año pasado los presupuestos de Orozco, que entonces contaron con el voto negativo del BNG.
El alcalde, que en esta ocasión actuó como portavoz de su grupo, hizo hincapié en que no resultó sencillo elaborar este presupuesto, que se eleva a 105 millones de euros. Orozco aclaró que se trata de unas partidas que "posibilitan" atender las necesidades básicas de los lucenses, "fundamentalmente de aquellos que más lo pueden necesitar", y, al mismo tiempo, "continuar realizando inversiones en lo que más se necesita". El alcalde explicó que había optado por la moción de confianza en lugar de prorrogar las cuentas de 2008, porque "es mejor para Lugo tener presupuestos que no tenerlos". "Sólo por un gesto de responsabilidad", agregó, "partiendo de las coordenadas económicas y sociales en las que se mueve este país, sólo por eso, presentamos esta cuestión de confianza", concretó.
Se esperaba con expectación la intervención del portavoz del BNG, Xosé Anxo Laxe, quien empezó dirigiéndose al alcalde para advertir que el pleno de ayer constató dos cosas: "La debilidad de su gobierno y su incapacidad de diálogo y de llegar a acuerdos". "La confianza", agregó, "no se la damos ni se la sacamos hoy aquí. Quien le retiró la confianza fueron los ciudadanos el 27 de mayo del pasado año".
También recordó a los populares que fueron ellos quienes el año pasado apoyaron los presupuestos y ahora, dijo, a las puertas de unas elecciones autonómicas "quieren apartarse de esa incómoda situación y proponen derrocar al gobierno del señor Orozco, al que ustedes apoyaron durante año y medio". "El discurso del PP es simple: 'quítate tú para ponerme yo', pero sin aportar alternativas, ni soluciones, ni siquiera propuestas. ¡Y para eso nos piden el apoyo del BNG!", enfatizó.
Orozco agradeció el gesto del BNG y el pleno acabó con una votación nominal donde los 12 concejales del PSOE dieron su voto favorable, los 9 del PP se pronunciaron en sentido contrario y los cuatro del Bloque optaron por la abstención, con el matiz del edil Antón Bao de que lo hacían "por Lugo" y con el portavoz nacionalista puesto en pie para otorgar su "abstención".
