El partido de Mandela se rompe

El Congreso Nacional Africano (ANC, en sus siglas en inglés), el mayor movimiento de liberación en el continente, el partido que fundó en 1932 Nelson Mandela, el primer dirigente de Suráfrica elegido bajo sufragio universal, quedó ayer oficialmente roto con el nacimiento de un nuevo partido político.

La flamante organización, aún por bautizar, está capitaneada por altos cargos de la Administración del anterior presidente del Gobierno surafricano, Thabo Mbeki, quien fue obligado a dimitir en septiembre por su rival en el partido, Jacob Zuma. Pocos meses antes, Zuma también arrebató a Mbeki el liderazgo del Congreso Nacional Africano.

Más de 6.000 personas asistieron este fin de semana en Johannesburgo a la convención para la creación del nuevo partido, que pretende desplazar del poder a un ANC que goza de mayoría absoluta desde 1994, con la llegada de la democracia a Suráfrica.

La creación del nuevo partido, por el momento denominado Congreso Nacional Surafricano (SANC, en sus siglas en inglés), supondrá que antiguos compañeros de lucha anti apartheid se vean las caras, enfrentados, en las próximas elecciones, previstas para el próximo año. El enfrentamiento no va a ser incruento. Ayer mismo, Zuma, en un mitin en Soweto, acusaba a los gestores del nuevo partido de ser "serpientes traidoras al ANC".

Diversas reuniones del nuevo partido han sido boicoteadas por militantes airados del ANC. La convención de este fin de semana, prevista en Bloemfontein (donde se fundó el ANC), tuvo que trasladarse a Johannesburgo por motivos de seguridad.

Los principales dirigentes del nuevo partido son Mosiuoa Terror Lekota, ex ministro de Defensa bajo la Administración de Mbeki, y Mbhazima Shilowa, ex presidente de la provincia de Gauteng. Ambos representan a un sector nutrido del ANC disconforme con el trato otorgado por el partido a Mbeki. Este sector crítico del Congreso Nacional Africano se muestra receloso ante el auge del populista y controvertido Jacob Zuma, contra el que penden diversas acusaciones por corrupción en operaciones de compra de armas para el Ejército del país.

Los 6.000 congregados excedieron las expectativas de Lekota y Shilowa, que esperaban sólo 4.000 delegados, lo que denota el nivel de división en el ANC, en cuyo último congreso Mbeki fue vencido con un 40% de los votos.

Diversos dirigentes del ANC, que se prepara ya para una mayor defección de parlamentarios a medida que se acerquen las elecciones, acusan a Mbeki de estar tras la nueva formación de Lekota y Shilowa. El ex presidente Mbeki ha negado que vaya a hacer campaña por el partido y aseguró haberse retirado de la vida política.

El nuevo partido de Lekota y Shilowa, bautizado popularmente con la mezcla de sus apellidos como Shikota, denunció el uso de lenguaje y canciones violentas por el propio Zuma (cuya canción favorita en los mítines, heredada de los tiempos de la lucha contra el apartheid, es umshini wami, pásame la ametralladora) y el recurso al tribalismo (Zuma es zulú y no es infrecuente ver a sus seguidores portar una camiseta con el lema 100% zulú) del que el ANC siempre ha huido.