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Entrevista:DESAYUNO CON... DIEGO LUNA

"El miedo me acompaña siempre, y es bonito"

Rocío García

Su avión procedente de San Francisco y con escala en Chicago ha aterrizado hace media hora en Madrid, pero Diego Luna, actor, director y productor mexicano, se presenta energético en el salón de desayunos del hotel con un hambre atroz. Se ha dado una ducha rápida y baja con un traje oscuro y una camisa para que, "por favor, por favor", se lo planchen. Unas horas más tarde, asistirá a la presentación de Solo quiero caminar, el filme de Agustín Díaz Yanes, que se estrena hoy, y en el que Luna interpreta a un joven gánster desconectado emocionalmente de la realidad tras la temprana muerte de su madre y que ha convertido el rencor en el motor de su vida. Un narcotraficante que nada tiene que ver con la realidad mexicana. "Nos quedamos muy cortos. En México se vive ahorita un descontrol total. Nos acostumbramos como sociedad a vivir un nivel de violencia altísimo, pero nuestro consuelo era que esa batalla no nos pertenecía, que estaba alejada de nosotros. Ahorita sí, las ejecuciones y los secuestros van directos contra todos".

El actor cree que México despierta a una violencia que antes veía ajena

Se acerca al bufé del desayuno y va observando con cuidado los platos que le ofrecen, aunque enseguida advierte que desde que bajó del avión ha estado soñando con el pan con tomate. Cuando llega a la mesa, su plato rebosa de manjares. Por supuesto, el pan con tomate y jamón, pero también un huevo frito, varias clases de queso, rollitos de jamón de York y un botecito de mostaza. "Estoy padre con la elegancia", se disculpa con una sonrisa, "pero me iba dando la sensación de que cuando me iba poniendo ya nunca más estaría delante de este bufé".

Tiene 28 años y hace 10 semanas ha sido padre de un niño del que muestra feliz una foto en su teléfono. Jerónimo es un bebé gordito y maravilloso que viste de Superman. "Es que le gusta volar", ríe al recordarlo. "Es un amor que no conoces, que no sabes ni que existe, es una sensación fortísima de que tu corazón ya pertenece a otra persona. Se me ha acomodado el corazón y la vida la siento más fácil con un hijo".

No para y desborda una actividad trepidante. Entre el bebé, los ensayos -regresa mañana a México para comenzar los trabajos de El buen canario, obra de teatro dirigida por John Malkovich-, los estrenos -en San Francisco asistió a la presentación de Milk, el filme de Gus van Sant sobre el político gay norteamericano y en el que interpreta a su último amante- y los aviones de aquí para allá, Luna ya no duerme. Ama estar en los proyectos desde el principio: "Me gusta ser el catalizador, generar mis propias historias, me encanta la posibilidad como productor de cuando la cosa es un boceto, un dibujito y se va materializando y se viene abajo y luego arriba... quiero ser parte de todo". Tras dirigir un documental sobre el boxeador mexicano Julio César Chávez, prepara para 2009 el salto a la ficción con una historia "muy chiquita sobre la dinámica de una familia en la cabeza de un niño".

Vino a Madrid con miedo, iba a ver anoche, por primera vez y completa, Solo quiero caminar y a él le gusta llegar más protegido. Pero es ese miedo el que le hace grande. "El miedo es lo más bonito de un actor. A mí, el miedo me acompaña siempre. Si no te paraliza, se convierte en algo productivo. A mí los que de verdad me dan miedo son aquellos que dicen que no tienen miedo".

Diego Luna estrena hoy <i>Solo quiero caminar.</i>
Diego Luna estrena hoy Solo quiero caminar.CLAUDIO ÁLVAREZ

Hotel Puerta de América. Madrid

- Dos desayunos continentales con huevo frito, pan con tomate, jamón serrano, jamón de York, quesos variados, agua y cafés.

Total con IVA: 42,80 euros.

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