Las cualidades de la arquitectura

Los historiadores del arte al encasillar la arquitectura en estilos, es decir, al establecer afinidades formales entre edificios han generado la ilusión de un conocimiento de la arquitectura que emana del simple reconocimiento de sus características formales. Pero reconocer no es sinónimo de comprender. Si bien es cierto que, en cuanto arte, la arquitectura se materializa en formas construidas no es menos cierto que las cualidades formales por sí solas no definen la arquitectura ya que ésta posee una componente funcional y técnica que en muchos casos se antepone a la poética de las formas y al libre juego de los espacios. También posee unas implicaciones sociales e ideológicas que añaden más dificultad a su comprensión. El actual comisario de la Bienal de Venecia de Arquitectura, Aaron Betsky, sorprendía este verano con la frase "los edificios son la tumba de la arquitectura", y, bien mirado, tiene razón en un doble sentido ya que la arquitectura, por un lado, no puede reducirse a un edificio por muy complejo y maravilloso que éste sea y, por otro, más del 99% de los edificios que han sido construidos por arquitectos apenas participan de las cualidades de lo arquitectónico. Basta con salir a la calle para comprobarlo.

Pero una de las maneras de comprender la arquitectura es, desde luego, intentar conocer las obras. Historiadores y críticos muestran y analizan edificios concretos que presentan como paradigmas de una época, un lugar, un estilo, una cualidad tipológica, formando así un museo imaginario. Así una serie de edificios se han convertido en iconos arquitectónicos tácitamente aceptados como tales por casi todos y que forman parte de la cultura común de la población. Con estos edificios sucede como con la pintura o con la música, muchos reconocen la imagen de La Gioconda o los primeros compases de la Quinta Sinfonía de Beethoven pero no saben qué significan o por qué son así, ni siquiera por qué son importantes. Por esto, no basta con señalar cuáles son sino que es necesario explicar por qué lo son.

Una colección de DVD, Arquitecturas, presenta ahora las tres primeras entregas de una serie de filmaciones realizadas para la televisión Arte que muestran monográficamente algunos de esos edificios carismáticos, desde el Auditorio Building de Chicago (1886-1890) hasta el Museo Guggenheim de Bilbao (1997), prometiendo en los próximos números abrir el compás temporal desde la abadía de Sainte Foy de Conques (siglo XI) hasta uno de los últimos edificios de Zaha Hadid, el Centro de las Ciencias Phaeno que se ha terminado de construir no hace ni tres años en Wolfsburg. Se trata, pues, de una selección heteróclita de edificios, con desigual interés arquitectónico, pero que ayudarán a comprender el nivel de complejidad y la maraña de circunstancias que definen el campo de actuación de la arquitectura.

A través de algunos de los edificios filmados y comentados en estos DVD, como el Centro Municipal de Säynätsalo de Alvar Aalto, la Bauhaus de Walter Gropius, el convento de la Tourette de Le Corbusier, la Caja de Ahorros de Otto Wagner, o el ya mencionado Auditorio Building de Dankmar Adler y Louis Sullivan, se pueden llegar a conocer las mejores cualidades de la arquitectura ya que estas obras las poseen y, desde luego, ninguno de estos edificios ha sepultado los ideales de la arquitectura. Se trata, muy claramente, de unos trabajos de divulgación, pero la claridad de los guiones y la calidad de las filmaciones, realizadas por Julien Donada, Richard Copans, Frédéric Campain, Stan Neumann y Catherine Adda, permiten conocer bien los edificios, por medio de imágenes en movimiento, que simulan paseos y vuelos, y comprender algunos aspectos formales, compositivos y estructurales que son explicados con eficaces maquetas, esquemas e imágenes, así como datos sobre la historia, la ciudad, el entorno o el arquitecto que son expuestos sin caer en la pedantería o la falsa erudición. Para su presentación en DVD los editores han pedido a "reconocidos" arquitectos catalanes que presenten cada uno un edificio, acto innecesario, dada la claridad expositiva de los filmes y el tono divagatorio que han adoptado algunos de estos arquitectos.

Arquitecturas. Editrama. Ediciones Trasbals Multimedia.