PP y PSOE intentan que la guerra del agua no quiebre su disciplina

De nuevo la batalla del agua atraviesa las regiones y pasa por encima de los intereses de partido. Y así lo viven en estos momentos las direcciones nacionales del PSOE y del PP, que se ven en la necesidad de convencer a sus diputados de Murcia (siete del PP y tres del PSOE) y Valencia (19 populares y 14 del PSPV) para que el próximo martes voten a favor de la toma en consideración del Estatuto de Castilla-La Mancha. Es decir, que al menos permitan que se discuta. Después, en la Comisión Constitucional empezará la negociación para eliminar y pulir los aspectos más controvertidos y que al este mediterráneo se le antoja insoportable.

El problema por excelencia se llama trasvase del Tajo al Segura, ya que las Cortes de Castilla-La Mancha, por unanimidad, han aprobado su caducidad para 2015. El martes, desde la tribuna de oradores del Congreso, el presidente de la región, José María Barreda, y representantes del PSOE y del PP de la Cámara autonómica, defenderán la integridad del texto. El asunto se complica algo más en el PP por cuanto la número dos nacional, María Dolores de Cospedal, es la número uno de Castilla-La Mancha. Desde su primer cargo debe oponerse a poner una fecha de caducidad al trasvase, pero como líder regional, defenderlo como ya lo ha hecho con su voto en las Cortes regionales.

Su incomodidad es ostensible, dado que hubiera podido subir como Barreda el próximo martes a la tribuna de oradores, en su calidad de diputada autonómica, pero ha declinado. Las planas mayores de los partidos y de los grupos han tomado las riendas del asunto. José Antonio Alonso, portavoz del Grupo Socialista, marcará la posición del partido en el debate del martes y abrirá la puerta a la negociación. Desde el PP, tomará la palabra, el portavoz adjunto, Arturo García Tizón. Pero antes, Soraya Sáenz de Santamaría, portavoz y la vicesecretaria general, Ana Mato, habrán hecho el trabajo de convencer a los diputados murcianos y valencianos de que voten a favor de la toma en consideración, después ya se verá. En esta tarea ha empezado ya a trabajar la responsable autonómica del PSOE, Mar Moreno, aunque también se interesará la secretaria de organización, Leire Pajín. De momento el secretario general del PSPV, Jorge Alarte, invoca la resolución que a iniciativa de los socialistas, apoyada por el PP, aprobaron las Cortes valencianas, oponiéndose "a cualquier cláusula de caducidad del trasvase", recuerda Alarte.